La elección de Pedro Sánchez de nombrar a Carmen Montón como nueva ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social va a suponer un cambio importante en la vida de la exconsejera de Sanidad de la Comunidad Valenciana. Además de tener que trasladarse a Madrid y ser a partir de ahora responsable de la política sanitaria a nivel estatal, Montón va a ver cómo su salario también va a mejorar.
Y es que, Carmen Montón era una de las consejeras que menos cobraban de las 17 consejerías de las distintas comunidades autónomas. En el año 2017, la ya exconsejera recibía un salario anual de 58.175 euros, con los complementos incluidos. Se situaba en los últimos puestos junto a consejeras como Luisa Real, en Cantabria, o Patricia Gómez, en Baleares. En todo caso, muy lejos de los 109.000 que recibía Toni Comín.
Montón, junto a las responsables sanitarias de Cantabria o las Islas Baleares, era de las que menos cobraban; mientras, en 2018 recibirá la parte correspondiente a los meses que quedan hasta final de año
Sin embargo, el cargo de ministra de Sanidad va a suponer un cambio considerable en su nómina. Según está fijado en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018, al puesto de ministra le corresponde un salario de 71.424,12 euros al año, o lo que es lo mismo, 5.952,01 euros al mes.
Para que Montón perciba esta cantidad hace falta que se aprueben finalmente los PGE, que están tramitándose ahora en el Senado. Mientras, en los presupuestos del año 2017 se fijaba una cantidad de 70.368,48 euros anuales. En todo caso, para el 2018, la nueva ministra de Sanidad deberá recibir la parte correspondiente a los meses que quedan hasta final de año.