El Ministerio de Sanidad da un nuevo paso hacia el Plan Integral frente al Tabaco. Concretamente, Javier Padilla, secretario de Estado de Sanidad, se ha reunido con el presidente y el vicepresidente del Comité Nacional de Prevención de Tabaquismo (CNPT). Durante este encuentro, se ha puesto sobre la mesa este plan, "que contempla reducir al máximo los espacios sin humo y aplicar medidas como el empaquetado genérico o la subida de impuestos".
Padilla ha insistido en que "lo que buscamos es una cosa muy sencilla: proteger a las mujeres embarazadas; proteger a losniños; a las personas que simplemente no quieran inhalar el humo del tabaco; así como proteger a los trabajadores y trabajadoras que se ven expuestos a ese humo del tabaco sin tener por qué”.
De esta manera, el plan se va a poner en marcha “no sólo porque nosotros queramos, sino porque es parte del sentido común de la sociedad”, ha remarcado, tras recordar que “nuestra sociedad va muy por delante de nosotros” y, recientemente, en una encuesta de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria, el 72% de la población decía apoyar que, por ejemplo, en las terrazas no se fume.
"El plan se va a poner en marcha no sólo porque nosotros queramos, sino porque es parte del sentido común de la sociedad"
Por su parte, el presidente de Comité Nacional de Prevención del Tabaquismo, Francisco Pascual, ha explicado que en la reunión se ha revisado el convenio que existe con la Dirección General de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, para intentar cumplimentar aspectos preventivos y aspectos, también, de incidencia política y pública para mejorar los problemas relacionados con el tabaco. Los compromisos, ha explicado, pasan por organizar una reunión anual; un congreso, que probablemente se celebre el año que viene en Andalucía; y algunas reuniones monográficas, una de las cuales sería específica sobre la “reducción de daños”, ha explicado.
El CNPT ha presentado el borrador de un documento obre la “reducción de daños” porque “creemos que tanto la población como los profesionales sanitarios deben saber qué es útil y qué no es útil en el tratamiento contra el tabaquismo”, ha expuesto Pascual. “No debemos dejarnos influenciar por presiones que nada tienen que ver con la sanidad”, ha recalcado.
También se van a establecer objetivos “que nos hagan avanzar en la actualización de temas que sean cruciales, como el consumo del tabaco en la mujer o en edades infantiles, en relación con los vapeadores, la patología subyacente que generan los nuevos artilugios para fumar”, ha comentado.
“No debemos dejarnos influenciar por presiones que nada tienen que ver con la sanidad”
“La idea es que no se hable solo del tabaco tradicional, sino también de los métodos que va sacando la industria para, de forma engañosa, decirle a la gente que son más saludables. Lo saludable es no consumir tabaco, ni en estos productos alternativos”, según sus palabras.
Por su parte, el vicepresidente del CNPT y médico epidemiólogo del Servicio de Neumología del Hospital Universitario de La Princesa, Joan Soriano, ha dicho que en este organismo “estamos entusiasmados con este momento histórico”. “Todos los astros se están alienando y parece que hay posibilidad de mejorar la Ley antitabaco”.
El CNPT cuenta en su junta directiva con médicos, enfermeras, farmacéuticos y técnicos de salud pública, engloba a 46 sociedades científicas y agrupaciones que incluyen, por ejemplo, a los pacientes. “Todos estamos entusiasmados con la oportunidad de poder dar un paso adelante para conseguir que la salud pública de los españoles mejore y volver a alinear a España entre los países que tienen una legislación más avanzada”, ha indicado Soriano, que ha manifestado que “tenemos que conseguir la primera generación libre de tabaco en 2030 y en los años sucesivos, como dice el convenio marco del control del tabaco de la OMS”.