Los funcionarios de prisiones no se rinden. Tras el encadenamiento de varios representantes de los principales sindicatos a las puertas del Ministerio de Interior hace un par de semanas, el pasado viernes los trabajadores de Instituciones Penitenciarias aprovecharon la celebración del Consejo de Ministros en la sede de la Delegación del Gobierno en Andalucía (Sevilla)p para concentrarse y manifestarse. Su único fin era ser escuchados.
Exigen al departamento que preside el ministro Fernando Grande-Marlaska que rectifique y vuelva a poner sobre la mesa las mejoras propuestas a este colectivo hace aproxidamente un mes. No solo se trata de mejoras salariales, entre las reivindicaciones del personal de prisiones está la dotación de recursos humanos y materiales a la sanidad penitenciaria, que se encuentra actualmente en una situación de precariedad que pone en riesgo la salud de los presos.
Los funcionarios de prisiones dan por rotas las negociaciones y el diálogo con el Ministerio de Interior
"A la vista de que el Ministro Fernando Grande-Marlaska se desdice de los prometido ante el secretario general de Instituciones Penitenciarias continuamos con las movilizaciones para que se no se escuche. Se nos ha prometido una serie de mejoras que repentinamente se han retirado de encima de la mesa", asegura Paco Amaya, responsable del área de Sanidad en prisiones de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF).
Se mantienen así las movilizaciones anunciadas por la Plataforma Sindical de la Junta de Personal del Ministerio del Interior y de sindicatos de prisiones como ACAIP, CSIF, UGT, CCOO y CIG. Las negociaciones con el Gobierno de Pedro Sánchez están "completamente rotas".
UNAS CONDICIONES LABORALES DIGNAS
A principios de octubre, Interior ofreció una subida media de 365 euros lineales al conjunto de la plantilla de prisiones, que se haría efectiva a lo largo de 2019, 2020 y 2021, lo que supone una oferta global de 122.646.399 euros. Sin embargo, posteriormente esta oferta fue retirada y el Ministerio alegó para ello que solo se trataba de un "estudio técnico y no una propuesta formal", tal y como indican fuentes sindicales.
Según CSIF, la propia Administración reconoce que se necesitan al menos 3.200 funcionarios de prisiones para cubrir el déficit existente.
Tras varios intentos fallidos por parte de Plataforma Sindical de la Junta de Personal del Ministerio del Interior para sentarse a hablar con los responsables de Interior, los funcionarios han decidido romper las relaciones con el departamento que dirige Grande-Marlaska y continuar con sus movilizaciones hasta conseguir reabrir el diálogo.
BALANCE DE LA HUELGA
"Es la primera huelga general que se hace en Instituciones Penitenciarias de la democracia y la repercursión entre el personal de las prisiones españolas ronda entre el 92 y el 95%. La propia Administración reconoce un 50% de seguimiento de los paros. Si bien, los servicios mínimos son abusivos porque se nos exige reforzar con hasta cuatro personas más de lo que vendría a ser la plantilla un día normal", indica el líder sindical.
Las relaciones con Interior están rotas. "No asistiremos a ninguna reunión hasta que no se sienten a negociar la propuesta que ellos mismos habían hecho. Mientras, no tenemos nada que hablar con el Ministerio", señala Paco Amaya.
Los sindicatos aseguran que si Interior no rectifica la huelga general podría volverse indefinida
Los paros se reaunudarán el 6, 8, 13 y 15 de noviembre, pero podrían convertirse en indefinidos. "Estamos hartos. Ya está bien de maltratar al sistema de prisiones", afirma este responsable de CSIF.
ASÍ ESTÁ LA SANIDAD EN LAS PRISIONES
Enfermeros que asisten como médicos, cupos de pacientes muy elevados, muertes por sobredosis de medicamentos... El caos reina en la sanidad penitenciaria ante la carencia de recursos. La falta de personal es acuciante. La propia Administración lo reconoce. Esta misma semana los sindicatos recibieron una carta de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias prometiéndoles un cambio en la gestión del sistema sanitario.
En ella, la subdirectora general de coordinación de sanidad penitenciaria, Carmen Martínez Aznar, reconoce la "difícil situación" que atraviesa en estos momentos la sanidad en las prisiones españolas. "Conocemos la situación actual y el esfuerzo que realizáis unos y otros para desarrollar y mantener las tareas y actividades sanitarias y la calidad asistencial que, desde hace tanto tiempo, venís prestando", recoge el documento.
La subsecretaria general de sanidad penitenciaria envió esta semana una carta a los sindicatos con una serie de promesas para paliar los problemas del sistema sanitario de las prisiones españolas
Se alude a que las negociaciones para completar la transferencia de las competencias sanitarias en materia penitenciaria a las comunidades autónomas siguen abiertas y se desglosan una serie de propuestas para paliar la falta de personal que sufre el sistema sanitario de las cárceles españolas. Pese a todo, las organizaciones sindicales no se creen estas promesas y reivindican "medidas reales" ante el hartazgo que llevan sufriendo casi una década.