Redacción | Madrid
Cada año aumenta la esperanza de vida en el mundo. Se prevé que en 2020, por primera vez en la historia, los mayores de 60 años superarán a los menores de 5, y que en 2050 sean más de 2.000 millones mayores de 60, frente a los 841 millones que hay actualmente.
Es evidente la preocupación que muestran desde la OMS, que acaba de publicar en “The Lancet” una nueva serie sobre salud y envejecimiento en el que advierte de la creciente carga de enfermedades crónicas que afectará enormemente a la calidad de vida de los ancianos.
Desde la organización, aconsejan prudencia a la hora de hacer recortes sanitarios y “tener cuidado para que las reformas no acentúen las desigualdades, que son la causa de la gran parte de limitaciones funcionales que vemos en las personas mayores”, afirma el director del Departamento de Envejecimiento y Ciclo de Vida de la OMS, John Beard. Se refiere, concretamente, a que el 80% de las personas mayores viven en países de ingresos bajos y medios.
Esta organización y otras como la encuesta mundial Gallup han hecho estudios longitudinales sobre el envejecimiento en Brasil, China, India y Corea del Sur, que “empiezan a equilibrar la balanza y a presentar datos que permiten aportar políticas determinadas”, asegura el director del Departamento de Estadística e Informática Sanitaria de la OMS, Ties Boerma.
Lo que se recomienda, principalmente, es un cambio normativo para alentar a los adultos mayores a formar parte de la fuerza de trabajo durante más tiempo, por ejemplo, eliminando las trabas fiscales por trabajar después de la edad de jubilación. También poner en marcha medidas de bajo coste de prevención y detección temprana de enfermedades para mejorar su calidad de vida.
Porque salud necesitamos todos… ConSalud.es
Cada año aumenta la esperanza de vida en el mundo. Se prevé que en 2020, por primera vez en la historia, los mayores de 60 años superarán a los menores de 5, y que en 2050 sean más de 2.000 millones mayores de 60, frente a los 841 millones que hay actualmente.
Es evidente la preocupación que muestran desde la OMS, que acaba de publicar en “The Lancet” una nueva serie sobre salud y envejecimiento en el que advierte de la creciente carga de enfermedades crónicas que afectará enormemente a la calidad de vida de los ancianos.
Desde la organización, aconsejan prudencia a la hora de hacer recortes sanitarios y “tener cuidado para que las reformas no acentúen las desigualdades, que son la causa de la gran parte de limitaciones funcionales que vemos en las personas mayores”, afirma el director del Departamento de Envejecimiento y Ciclo de Vida de la OMS, John Beard. Se refiere, concretamente, a que el 80% de las personas mayores viven en países de ingresos bajos y medios.
Esta organización y otras como la encuesta mundial Gallup han hecho estudios longitudinales sobre el envejecimiento en Brasil, China, India y Corea del Sur, que “empiezan a equilibrar la balanza y a presentar datos que permiten aportar políticas determinadas”, asegura el director del Departamento de Estadística e Informática Sanitaria de la OMS, Ties Boerma.
Lo que se recomienda, principalmente, es un cambio normativo para alentar a los adultos mayores a formar parte de la fuerza de trabajo durante más tiempo, por ejemplo, eliminando las trabas fiscales por trabajar después de la edad de jubilación. También poner en marcha medidas de bajo coste de prevención y detección temprana de enfermedades para mejorar su calidad de vida.
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