El consumo de cigarrillos electrónicos se ha extendido de manera muy rápida en nuestro país. La llegada de estos dispositivos ha hecho además que, desde el Ministerio de Sanidad, se planteen medidas y normativas para regular estos dispositivos de la misma manera que se regula el tabaco convencional, e incluso se ha planteado la prohibición de los dispositivos de un solo uso.
El impacto de este consumo no sólo es negativo para nuestra salud, también lo es para el medio ambiente. Es por ello que, incluso desde la Organización Mundial de la Salud (OMS), se ha puesto este consumo sobre el punto de mira. No obstante, los datos más recientes llegados desde Estados Unidos, sugieren que el consumo en este país está decayendo.
Concretamente, la entidad CDC (Centros para el Prevención y el Control de Enfermedades), ha dado a conocer que, en EEUU, el uso de cigarrillos electrónicos en los jóvenes ha caído a su nivel más bajo en una década. Las cifras de la FDA son claras: medio millón menos de jóvenes en los Estados Unidos han usado de manera habitual los cigarrillos electrónicos durante el 2024 en comparación con el 2023.
En EEUU el uso de cigarrillos electrónicos en los jóvenes ha caído a su nivel más bajo
Más concretamente, se ha sabido que, dentro del grupo de jóvenes que han consumido estos cigarrillos en los últimos 30 días, se ha pasado de los 2,13 millones (7.7 %) de jóvenes en el 2023 hasta el 1,63 (5.9 %) en el 2024. Además, la entidad comenta que la mayor parte de la bajada se debe al cese del consumo en los estudiantes de secundaria.
"La cantidad de jóvenes que usaron cigarrillos electrónicos en el 2024 es aproximadamente un tercio de lo que fue cuando llegó a su punto máximo en el 2019", explican. En aquel año de máximo histórico, más de cinco millones de jóvenes consumían este tipo de tabaco de manera habitual. Desde el gobierno de Estados Unidos se celebra esta bajada, que se achaca a los esfuerzos en salud pública del ejecutivo.
Eso sí, el gobierno insta a "no dormirse en los laureles", pues el consumo todavía sigue siendo notable pese a haberse reducido. No en vano, un 26,% de los fumadores habituales reconoce que consume los cigarrillos diariamente, especialmente los dispositivos con sabores (87,6%); y los de un solo uso. "Aunque es alentador ver que estos números permanecen relativamente bajos en la actualidad, la conclusión es que nos preocupa cualquier producto de tabaco que atraiga a los jóvenes", alertan desde el Gobierno.
ESPAÑA, ¿MISMA SITUACIÓN?
Con estos datos cabe preguntarse si en España este consumo también está siguiendo la misma tendencia. La respuesta en este caso sería negativa, tal y como avalan los últimos datos del Informe 2023 sobre Alcohol, Tabaco y Drogas ilegales en España, del Ministerio de Sanidad.
Los datos más recientes señalan que, actualmente, más de la mitad de los jóvenes (54,6%) en nuestro país ha consumido en al menos una ocasión cigarrillos electrónicos. Si bien su uso en mayores de 35 no es tan alto, la prevalencia en los más jóvenes sí que es preocupante. Lejos de disminuir los datos, este consumo en España ha aumentado en un 10,3% con respecto al 2021, siendo, de hecho, el dato del 2023 el más alto de la historia.
Dado que en EEUU este consumo comenzó a popularizarse algunos años antes que en nuestro país (el pico que hemos alcanzado se alcanzó en EEUU en el año 2019), es posible que la tendencia en España siga también un camino similar. No obstante, todavía no se ha llegado a ese punto y las cifras siguen aumentando. Es por ello que los esfuerzos en materia legislativa son más necesarios que nunca, motivo por el que el ministerio ya ha comenzado a poner en marcha su plan antitabaco, que regula precisamente este consumo.