La ministra de Sanidad, Mónica García, ha comparecido este miércoles en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados para hacer balance de su desempeño durante este año, así como para rendir cuentas sobre la situación real de las necesidades e ineficiencias pendientes de ser resueltas en el Sistema Nacional de Salud.
De esta manera, García ha querido resaltar que nuestro Sistema Nacional de Salud es "un tesoro" que se sostiene día a día gracias a miles de "profesionales excepcionales que se dejan la piel", y ha llamado a todos -también a los políticos- a "poner su granito de arena" para que sigamos siendo uno de los países referentes en lo que a sanidad se refiere. "El gobierno de España, por supuesto, hará su parte".
Esta estrategia, cuyo horizonte temporal serán los próximos 4 años, va ha implantar medidas legislativas y no legislativas que van a fomentar "el liderazgo público" en toda la cadena del medicamento
En esta línea, la ministra ha admitido sentirse "satisfecha" con el trabajo que su departamento ha hecho hasta ahora, aunque es consciente de que queda muchísimo trabajo por hacer. "Estamos preparados para lo que viene". "En este último año hemos visto como los parámetros del CIS reflejaban que la sanidad ha dejado de ser una de las principales preocupaciones de los españoles, pero esto no puede ser un motivo de inacción o complacencia", ha reflejado, dado que tenemos por delante muchísimos retos -demográficos, tecnológicos, etc- para reforzar nuestro sistema sanitario".
ESTRATEGIA DE INDUSTRIA FARMACÉUTICA
Entrando en materia, la responsable sanitaria ha abordado como uno de los principales avances la Estrategia de la Industria Farmacéutica 2024-2028 aprobada por el Consejo de Ministros este pasado 11 de diciembre. "Es un avance sin precedente destinado a transformar el modelo actual y que busca poner a la salud y al paciente en el centro". "La nueva estrategia también persigue un acceso equitativo, sostenible y eficaz a los tratamientos innovadores", ha remarcado.
Esta estrategia, cuyo horizonte temporal serán los próximos 4 años, va ha implantar medidas legislativas y no legislativas que van a fomentar "el liderazgo público" en toda la cadena del medicamento, una mayor prioridad de la salud del paciente y la investigación, así como una mayor autonomía estratégica del sector.
"Esta norma modernizará el sistema de precios de referencia permitiendo una mayor diferenciación de precios, aumentando su competitividad e impulsando el crecimiento del papel de los medicamentos genéricos y biosimilares en nuestro sistema"
Además, la estrategia incluye la reforma de la ley del medicamento, así como la modificación del decreto de financiación y precios del medicamento. "Esta norma modernizará el sistema de precios de referencia permitiendo una mayor diferenciación de precios, aumentando su competitividad e impulsando el crecimiento del papel de los medicamentos genéricos y biosimilares en nuestro sistema. Además, con este anteproyecto de ley también se pretende modificar la redacción actual del artículo relacionado con la prescripción, "especialmente en lo que respecta a las competencias de las enfermeras".
"Creemos que la prescripción debe estar ligada a las competencias de cada categoría profesional, y vamos a ajustar la ley para garantizar que las enfermeras puedan indicar medicamentos con plena seguridad jurídica y de manera acorde a sus competencias, sin procedimientos tan farragosos como los actuales", ha agregado la ministra. De la misma manera, ha señalado este miércoles que su departamento está trabajando para "proteger a las rentas más bajas" y "aumentar la progresividad del copago farmacéutico", tal y como aparece reflejado en el anteproyecto de ley de los medicamentos y productos sanitarios, compuesto por 146 artículos.
Estas medidas "redistribuyen el sistema de copago para evitar que el acceso a los medicamentos dependa de la situación económica de los pacientes vulnerables y pluripatológicos, cumpliendo así con los principios de justicia social y equidad en salud"
"Se establecen topes máximos de aportación mensual para la población activa con rentas bajas y medias, lo que beneficiará a más del 60 por ciento de los ciudadanos. Asimismo, las estimaciones que manejamos muestran que se reduce en un 10 por ciento la aportación global de la población y, específicamente, en un 33 por ciento para aquellos con ingresos inferiores a 18.000 euros", ha explicado, asegurando que estas medidas "redistribuyen el sistema de copago para evitar que el acceso a los medicamentos dependa de la situación económica de los pacientes vulnerables y pluripatológicos, cumpliendo así con los principios de justicia social y equidad en salud".
Finalmente, la ministra ha reconocido que "es cierto que puede haber retrasos en algunas decisiones de financiación de medicamentos, pero, una vez aprobados, los informes internacionales señalan que el uso de medicamentos en España es muy superior al de muchos países de nuestro entorno". Por ello, considera justo concluir que "España no tiene un problema estructural de acceso a los medicamentos, sino un acceso preferente tanto los ensayos clínicos como a todos los medicamentos antes de la financiación y por supuesto después de la financiación".