La brecha en salud a nivel mundial es amplia pero no lo es tanto si se compara con oras áreas. Esta es una de las conclusiones que se desprenden del último informe sobre competitividad global elaborado por el Foro Económico Mundial, entidad presidida por Klaus M. Schwab y que es comúnmente conocida por el Foro de Davos.
En este amplio documento, que analiza los perfiles de multitud de países, esta organización defiende que mientras la brecha es amplia en buena parte de los pilares, tanto en salud y estabilidad macroecónomica “es de menos de 30 puntos a nivel mundial”. Por su parte, en capacidad de innovación, la diferencia es de más de 40 puntos entre los continentes más y menos desarrollados.
Según el informe presentado por el Foro de Davos, "el acceso equitativo a una atención médica de calidad puede convertirse en la base de una sociedad más justa y próspera"
En concreto, los continentes con más puntuación en salud, por encima de los 80 puntos, se sitúan Europa y América del Norte, junto al este de Asia y los países de la zona del Pacífico, América Latina y el Caribe y la zona norte y la mitad este de África. Mientras, por debajo de 80 y por encima de 60 puntos, se sitúan la zona de Eurasia y la zona sur de Asia. Finalmente, el área del África subsahariana obtiene alrededor de los 50 puntos.
Para tratar de rebajar esta diferencia, Klaus M. Schwab defiende que “el crecimiento económico ha sido la forma más efectiva de sacar a la gente de la pobreza y mejorar su calidad de vida”, por lo que considera que es “fundamental” para ampliar la atención en salud. De la misma forma, sostiene que el “acceso equitativo a una atención médica de calidad” puede convertirse en “la base de una sociedad más justa y próspera”.
LEVE RETROCESO EN TECNOLOGÍA SANITARIA
Desde el punto de vista tecnológico, este informe advierte que “encontrar un equilibrio entre la integración de la tecnología y las inversiones de capital humano será fundamental para mejorar la productividad en la próxima década, fomentar la creatividad o gestionar la destrucción”. Así, manifiestan que “la tecnología también puede mejorar el acceso a los servicios básicos, las condiciones de trabajo, los resultados de salud y la seguridad económica”.
Este Foro advierte que los efectos negativos de la contaminación en la productividad económica se manifiestan principalmente a través de la salud
En este sentido, inciden en que “la adopción de las TIC se destaca como el área donde las economías en desarrollo se están poniendo al día relativamente más rápido”. Así, citan el caso del África subsahariana en cuanto al pilar de salud, ya que “está avanzando para alcanzar otras áreas del mundo”, mientras que la mayoría de las otras regiones “registraron un leve retroceso en 2019”.
CONTAMINACIÓN Y ECONOMÍA
Finalmente, el Foro de Davos dedica un apartado al ámbito de la contaminación. En él, recuerdan cómo “los efectos negativos de la contaminación en la productividad se manifiestan principalmente a través de la salud”. Para ello, mencionan cómo “una gran cantidad de investigaciones muestra que la exposición a productos químicos y la contaminación del aire aumenta la incidencia de enfermedades no transmisibles y las tasas de mortalidad”.
Como ejemplo, el Foro Económico Mundial reproduce un estudio reciente que trata de cuantificar el vínculo entre la contaminación del aire y la producción económica. Éste estima que “un aumento de la exposición a las partículas en suspensión de menos de 2,5 micras (PM2.5) en 10 microgramos por metro cúbico reduce la producción diaria en un 1%”.