El Gobierno británico ha dado luz verde este lunes a la prohibición de los vapeadores de un solo uso entre los menores británicos. Con esta medida el primer ministro, Rishi Sunak, persigue poner fin a la creciente expansión de estos dispositivos desechables entre los más jóvenes y evitar las consecuencias negativas que implican para su salud. No en vano, según las cifras oficiales que maneja el ejecutivo, el número de menores que usan vapeadores se ha triplicado en los últimos tres años, un 9 % de los británicos entre 11 y 15 años. Asimismo, se ha observado un singular aumento en los dispositivos de un solo uso, disparando su consumo por nueve entre los 11 y los 17 años.
En este sentido, parte principal de la estrategia pasa por restringir la venta y los sabores de los cigarrillos electrónicos, establecer la obligación de un empaquetado genérico o cambiar la manera en la que se exhiben estos productos para hacerlos menos atractivos en los niños. Igualmente, el Ejecutivo británico impondrá nuevas sanciones a las tiendas que vendan vapeadores a menores y prohibirán otros productos sustitutos. "Junto con nuestro compromiso de impedir que a los niños que cumplan 15 años este año o menos se les vendan cigarrillos legalmente, estos cambios dejarán un legado duradero al proteger la salud de nuestros menores a largo plazo", defiende Sunak.
Francia presentó recientemente el Plan Nacional de Lucha contra el Tabaquismo para este 2024, especialmente centrado en prohibir los dispositivos de vapeo de un solo uso
La preocupación por los vapeadores en la población infanto-juvenil ha cobrado mucha fuerza en los últimos años. La propia Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió este pasado diciembre que deberían prohibirse todos los sabores de vapeo. Una línea de trabajo que han adoptado también en países europeos como Francia, Alemania, Irlanda o Bélgica, así como en otros estados como Australia o Nueva Zelanda. Todos ellos han justificado las nuevas normativas en los efectos negativos para la salud de los menores, el hecho de que sea una vía de entrada al tabaquismo tradicional e, incluso, los efectos negativos para el medio ambiente de los vapeadores desechables.
En el caso de Francia, el Gobierno presentó recientemente el Plan Nacional de Lucha contra el Tabaquismo para este 2024, especialmente centrado en prohibir los dispositivos de vapeo de un solo uso, conocidos como “puffs” en el país vecino. Las principales medidas del documento van encaminadas también a encarecer su precio y restringir el consumo de tabaco –y similares- en determinados espacios. “Los vapeadores desechables son una aberración para la salud y una aberración para el medio ambiente", destacó el ministro de Sanidad francés, Aurelien Rousseau, en la presentación de la nueva estrategia antitabaco.
ESPAÑA: ULTIMA NUEVAS MEDIDAS
En España la iniciativa a la hora de regular el consumo de vapeadores en menores ha llegado de la mano de las CC.AA. En concreto, regiones como Galicia o Andalucía han marcado el paso con la tramitación de leyes que se implantarán este mismo año. “Estas iniciativas que se pondrán en marcha en algunos territorios nos servirán para ver si funcionan y para que las demás CC.AA. se vayan sumando. Nos parecen maravillosas las medidas propias de las Consejerías para mejorar la salud de su población, bienvenidas sean”, aseguraba el nuevo secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla.
El Ejecutivo ha prohibido este mes de enero la venta de cigarrillos electrónicos con aromas y ha extendido la obligación de reflejar advertencias sanitarias en su etiquetado
Por otro lado, desde el Ministerio de Sanidad ha optado también por poner el foco durante esta legislatura en avanzar en la estrategia nacional antitabaco. De esta manera, el Ejecutivo ha prohibido este mes de enero la venta de cigarrillos electrónicos con aromas y ha extendido la obligación de reflejar advertencias sanitarias en su etiquetado. Sin embargo, por el momento la nueva normativa sólo afectará al tabaco calentado y no a los dispositivos de vapeo, para los cuales el departamento de Sanidad todavía está ultimando avances en su normativa.
En este ámbito concreto, España dispone de una leyque prohíbe la venta de estos productos a menores de edad desde el año 2005. Igualmente, se limita la publicidad de vapeadores, elementos en la composición o su uso en determinados espacios. Una estrategia, equiparable a la de la propia normativa contra el tabaco, que Mónica García está decidida a continuar impulsando. “Los vapeadores tienen apariencia de juguetes y sabores dulces, pero son perjudiciales y la antesala del tabaquismo. Vamos a regularlos”, advertía la ministra.
La línea de trabajo en España y toda Europa apunta a incorporar la nueva realidad del consumo tabáquico a las actuales restricciones del tabaco tradicional
De esta manera, la línea de trabajo en España y toda Europa apunta a incorporar la nueva realidad del consumo tabáquico a las actuales restricciones del tabaco tradicional, con una especial preocupación por la creciente presencia del vapeo entre población cada vez más joven, así como por abordar el impacto sanitario y medioambiental que suponen los vapeadores desechables. Es de esperar, por tanto, la próxima llegada a nuestro país de una regulación más precisa que abarque todo el nuevo espectro dedispositivos liberadores de nicotina.