España entra a formar parte del Comité Permanente de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para Europa de la mano del Dr. Amós García Rojas. Durante tres años representará al país y sus objetivos en el organismo internacional para trabajar en la mejora de la Sanidad global con una apuesta de multilateralismo.
En una mañana ajetreada, el Dr. García Rojas, presidente de la Asociación Española de Vacunología (AEV) y jefe de Epidemiología del Servicio Canario de Salud, atiende a Consalud.es por teléfono para analizar los retos que afrontará durante los próximos años, con el foco en la pandemia.
Lo primero de todo: Enhorabuena por el nombramiento.
Muchas gracias. La verdad es que ahora mismo tengo una escala de sentimientos muy profundos. Que la Asamblea Mundial de la Salud haya votado esta candidatura presentada por el Ministerio de Sanidad supone para mí una gran emoción y también es una gran responsabilidad para luchar por la salud.
El principal reto será dar recomendaciones y perspectivas para contribuir a que esta pandemia, provocada por la Covid-19, deje de tener presencia entre nosotros
¿Qué supone para España entrar en el Comité Permanente de la OMS para Europa?
Después de tantos años sin tener algún profesional allí es muy importante poder contar con una persona con acento español en la entidad. Este es un ámbito en el que poder debatir y dar recomendaciones para las políticas sanitarias europeas con rigor científico e investigación, con el objetivo siempre de mejorar la Sanidad.
¿Qué vamos a aportar nosotros al Comité?
Nuestra experiencia. La pandemia nos ha convertido en líderes en vacunación contra la Covid-19 gracias a un sistema sanitario potente sostenido por profesionales entregados que han permitido que todo funcione. Tenemos un sistema que es gratuito y universal y, que como nos hemos dado cuenta, hay que reforzarlo. Esa enseñanza es la hay que aprender tanto a nivel nacional como internacional.
¿Cuáles van a ser los principales objetivos que vas a defender?
Aquí pensaremos en una forma global, y el principal reto será dar recomendaciones y perspectivas para contribuir a que esta pandemia, provocada por la Covid-19, deje de tener presencia entre nosotros. Además, hay que reforzar la idea de una perspectiva global, no solo con los países europeos, sino también con los países en vías de desarrollo. Se necesita trabajar y ser conscientes de que si hay países que no pueden vacunar a su población se seguirán produciendo casos, con la posibilidad de que aparezcan más variantes y estas sean resistentes a las vacunas.
Para conseguir una Sanidad global fuerte, está la posibilidad de que países en vías de desarrollo se fortalezcan
Al final es crear una Sanidad global fuerte, como decía la ministra Darias. ¿Qué retos ves esenciales para conseguirlo?
Pues hay muchos retos, pero principalmente está la posibilidad de que países en vías de desarrollo se fortalezcan. No solo a nivel sanitario, también en educación, servicios sociales y todos los ámbitos para poner freno a la pandemia y reforzar la salud. Estar en un foro de debate como el de la OMS me permitirá ponerlo en voz alta e intentar conseguirlo.
Según tu opinión, ¿cómo ha enfrentado la OMS la pandemia?
En una primera fase con incertidumbre y dudas. Al final nadie conocía este virus y las decisiones que se tomaron responden a esa incertidumbre. Con perspectiva y mayor conocimiento podemos cuestionar lo que se hizo, pero en ese momento era todo lo que había y se actúo en consonancia. Ahora nos hemos ido amoldando al virus y han llegado las vacunas, que son el elemento que nos permite enfrentar el virus con mayor contundencia.
Como jefe de del Servicio Canario de Salud ¿cómo lo viviste?
Han sido dos años con un problema gravísimo que teníamos que luchar por mejorar. Ha sido mucha intensidad, incertidumbre y sin sabores. Ha sido descorazonador ver el fallecimiento de pacientes que además no podían estar con sus familias, ver enfermar a la gente y no saber lo que pasaba, el agotamiento de los sanitarios que lo han dado todo… Por suerte con la llegada de las vacunas todo eso ha mejorado. La población ha recuperado la sonrisa y los profesionales han vacunado con mucho ánimo.
Ha supuesto que nos demos cuenta de la necesidad de potenciar y mimar la Sanidad, y no recortarla
Al vivirlo de cerca, ¿qué ha supuesto esta pandemia para la sanidad española?
Esta ha sido la crisis sanitaria más grave ocurrida, con problemas realmente complejos y complicados que han golpeado al sistema sanitario. También ha supuesto que nos demos cuenta de la necesidad de potenciar y mimar la Sanidad, y no recortarla. Hay que potenciar la estructura de salud pública, la atención primaria, seguir invirtiendo en la atención hospitalaria y reforzar la idea de que la sanidad es uno de los pilares básicos del estado de bienestar.
Como presidente de la AEV, ¿qué ha supuesto esta pandemia para la investigación de las vacunas?
Las vacunas se han desarrollado con tiempo récord. Es cierto que ya había una base trabajada, con mucho talento y conocimiento, y al mismo tiempo inversión. Al final eso es clave para el desarrollo de las vacunas.
¿Y en el caso de las vacunas españolas?
Pues van más lentas, la mayoría está en preliminares y solo Hipra ha avanzado en ensayos clínicos. Durante esta pandemia hemos demostrado que en España sobra talento, porque las vacunas son muy eficiente y únicas. Sin embargo, pese al talento, sin inversión es complicado. Esta sigue siendo de llorar, aunque haya mejorado, pero todavía nos queda mucho camino que recorrer en investigación.
En definitiva, ¿qué han sido estos dos años para ti?
Han sido dos años complicados. El discurso ha estado centrado fundamentalmente en la Covid, la pandemia se lo ha comido todo en el sistema sanitario. Por suerte ahora, en el segundo año, tenemos un escenario más optimista y mejores perspectivas.