La recién iniciada XIV Legislatura ha puesto en marcha todos sus órganos de trabajo, entre ellos la Comisión de Sanidad del Senado. Para representar las propuestas del Partido Popular en ella, esta formación ha vuelto a confiar en Antonio Alarcó, por lo que repite como portavoz de Sanidad. Este senador por Tenerife cuenta con una amplia experiencia profesional y política ligada al ámbito sanitario y ha sido uno de los impulsores de la Ponencia sobre Genómica, junto a José Martínez Olmos (PSOE). En una entrevista concedida a ConSalud.es hablamos de asuntos de actualidad, como el coronavirus, el MIR catalán o el ‘pin parental’, y de la visión sanitaria del PP.
¿Cómo afronta la nueva legislatura desde su puesto en el Senado?
Hay que recordar que antes de esta etapa hemos tenido un impasse negativo, ajeno a nosotros, donde se ha parado la actividad legislativa. Eso ha sido siempre malo y en sanidad más. Pero tenemos mucha ilusión y ganas de trabajar, como siempre. Venimos con mucha dedicación, preparación, experiencia y ganas de consensuar un Pacto por la Sanidad que es imprescindible para hacerla sostenible y equitativa. Además, tenemos un cambio de paradigma inevitable que es la genómica y habrá que pactar la cartera de servicios universal. Estaremos muy atentos a la titulación de Urgencias y seguiremos colaborando con la Organización Nacional de Trasplantes, uno de los mejores sistemas del mundo durante 27 años seguidos.
Sobre el MIR catalán: "Si desde Sanidad dicen que no se va a realizar, sería muy oportuno que de forma oficial se desmintiera. Evidentemente nos va a tener a nosotros enfrente"
¿Qué opinión le merece el nombramiento de Salvador Illa como ministro de Sanidad?
El ministro Illa es un político catalán, del PSOE, que no viene del mundo sanitario. Evidentemente hay que darle una oportunidad y un plazo lógico. Desde el Partido Popular ofrecemos la colaboración necesaria para impulsar un de los mejores sistemas del mundo. Pero aunque le demos los plazos correspondientes, es evidente que la primera medida que ha salido a la luz pública, la de traspasar el MIR a Cataluña, es tremendamente preocupante si va por esa vía.
Su formación se opone a traspasar dicha competencia formativa. Desde Sanidad, el director general de Ordenación Profesional niega que se vaya a realizar. ¿Qué opina?
Estamos hondamente preocupados. El pacto con Cataluña vislumbra que reclaman el MIR. Esto sería imperdonable, injustificable y una falta de respeto a uno de los sistemas de formación y elección de médicos especialistas mejores del mundo. Esta aberración no se puede llevar a cabo. Si desde Sanidad dicen eso, sería muy oportuno que de forma oficial se desmintiera. Evidentemente nos va a tener a nosotros enfrente. Llevamos más de 40 años de experiencia sanitaria como para que esto se pueda alterar por una negociación política ajena a la mejora de la sanidad.
¿Qué le parece que en la Región de Murcia pueda utilizarse el ‘pin parental’ para pedir permiso a los padres y madres sobre asuntos sanitarios?
Creo que son cosas distintas. En la Comisión de Sanidad del Senado y el Congreso se han aprobado mociones del PP que dicen que se debería incluir sistemáticamente en el conjunto de la ciudadanía -colegios, asociaciones, ONG- conceptos sanitarios básicos transmitidos por gente preparada, porque es la mejor forma de conseguir que mejoren los resultados sanitarios globales.
Pero ya sabrá que en esta comunidad han solicitado el permiso de los padres para autorizar una charla de una asociación sobre esclerosis múltiple.
Cuando está fuera de las materias troncales, obligatorias, siempre se ha pedido permiso a los padres para ver si las quieren hacer o no. Para explicarle a los niños, y a los no tan niños, los sistemas básicos sanitarios hay que tener una preparación especial. Mayoritariamente, quienes más preparación tienen para esos conceptos somos los sanitarios: enfermeros, médicos, farmacéuticos, biólogos, odontólogos, veterinarios, etc. Ahí hay material suficiente para recurrir de forma sensata y mejorar la cultura sanitaria de nuestro país. Para eso estamos, no hay que inventar ningún cuerpo nuevo. Es verdad que las ONG hacen una labor muy importante, pero es complementario. Y es cierto que los profesores y maestros, que son un cuerpo muy importante, también tienen que adquirir la mayor cultura sanitaria básica posible. Pero no mezclo una cosa con la otra.
"Una vida no tiene precio, pero la sanidad tiene un coste y no puede ser ilimitado porque es demagógico; deberíamos quitar la expresión ‘sanidad gratuita’, hace mucho daño al sistema. La sanidad no es gratuita, es financiada públicamente"
Hablando de competencias, ¿cómo se posiciona el PP ante la propuesta de Vox de devolver al Estado la relativa a sanidad?
El principio constitucional de que hay 17 comunidades autónomas y dos ciudades autónomas hay que respetarlo. Además, ha sido muy bueno para este país y se ha demostrado. Otra verdad es que se ha transferido la gestión a las autonomías. De ahí no se tiene que derivar en ningún lado que haya 17 sistemas sanitarios distintos, y a veces está ocurriendo. Por eso hay que pactar una cartera de servicios universal para todos los que vivimos en este país, seamos de donde seamos. El PP no está ni ha estado en devolver la sanidad al Estado. Estamos en que tenemos uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo y tenemos que sentirnos orgullosos. Tiene muchas fortalezas y algunas debilidades. Una de ellas es lo que comento sobre la cartera, para hacerlo equitativo y sostenible, dos conceptos que defendemos a ultranza.
Eso solamente es posible mediante un pacto sensato, público y transparente sobre lo que necesitamos los españoles. Porque una vida no tiene precio, pero la sanidad tiene un coste y no puede ser ilimitado porque es demagógico ya que se nos gripa y nos quedamos sin sistema. Deberíamos de quitar del vocabulario la palabra ‘gratuita’, hace mucho daño al sistema. La sanidad no es gratuita, es financiada públicamente, que es un factor de cohesión importantísimo y un logro social del Estado del bienestar español. Además, es importante que la sanidad cuente con provisión de servicio libre, porque la colaboración sanidad pública y sanidad concertada es clave. Lo que se necesita es una buena sanidad, con el principio básico de que sea de financiación pública.
Sobre el coronavirus: "El alarmismo no es correcto y creo que al principio se ha pecado de ello. Aunque prefiero pasarme de alarmismo que no tomar las medidas preventivas adecuadas"
Con respecto al coronavirus, ¿cree que se está gestionando bien en España la alerta sanitaria?
Es un asunto donde también se ha puesto a prueba a los medios de comunicación. Primero, la base debe ser transparente. Y creo que esta vez ha sido más que nunca. Después, creo que ha habido exceso de sensacionalismo, no digo ya por parte del Ministerio de Sanidad sino en general, que no es nada bueno. El alarmismo no es correcto y creo que al principio se ha pecado de ello. También es cierto que prefiero pasarme de alarmismo que no tomar las medidas preventivas adecuadas. Parece que el genoma está descrito y el Gobierno chino lo ha puesto a disposición de todos. Pero me preocupa enormemente la muerte del médico que denunció la alerta, es algo negativo. Más positivo es que ha habido más curas que muertes y que no ha habido afectación especial en niños. Lo grave es que es la séptima vez que ocurre que un virus modifique su genoma de animal para poder ser patógeno en el hombre.
La primera Proposición de Ley que se debatirá en el Congreso, la próxima semana, es la de eutanasia. El PP se mantiene firme en su oposición, ¿no?
Este es un asunto peliagudo. Lo más importante que hay que solucionar antes de eso es, sin duda, aprobar la ley de cuidados paliativos que está guardada en el cajón -gaveta en Canarias- y no se ha sacado. Es un poco atípico que se hable de la eutanasia y no se hable primero del derecho a la muerte digna, el testamento vital y de una ley de cuidados paliativos que esté en la cartera de servicios. Esos tres puntos no se han desarrollado y son derechos que se tienen. Los sanitarios estudiamos para dar vida, colaborar para que la gente viva mejor, cuidar la enfermedad y curarla cuando se puede, no para otra cosa.
"Hay que aprobar ya la especialidad de Genética porque el 45 % de las profesiones que habrá dentro de 10 años no existen hoy"
Usted, junto José Martínez Olmos (ex senador del PSOE), impulsó la Ponencia sobre Genómica. Una vez enviada al Gobierno, ¿qué sabe de dicha iniciativa?
Hay que señalar que en la Cámara Alta somos pioneros en toda Europa por llevar una moción, aprobada por unanimidad en pleno y la Comisión, para crear un plan estatal y una estrategia nacional. Creo que ha sido un antes y un después porque da una legitimidad muy importante. Ahí están las conclusiones fundamentales y a ello le dedicaremos mucho tiempo. En buena praxis política es de obligado cumplimiento para cualquier Gobierno por lo que sin duda han de ponerla en marcha. Fuimos capaces de llegar a unas conclusiones después de un año de discusión con numerosos especialistas, de derecho, ética, protección de datos, tecnología, informática, genética, etc. Por cierto, hay que aprobar ya la especialidad de Genética porque el 45 % de las profesiones que habrá dentro de 10 años no existen hoy.
Para finalizar, ¿ve posible vías de entendimiento en el ámbito sanitario con el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos?
El Partido Popular ya ha gestionado la sanidad y lo ha hecho bien. Nadie discute que una de las mejores ministras de Sanidad que ha habido es Ana Pastor. Nosotros estamos siempre buscando de forma positiva, porque la salud no tiene ideología, es un hecho individual. El PP estará siempre buscando grandes consensos. A nosotros nos tendrá dialogando ante los planteamientos sensatos y no ideológicos dentro del ámbito sanitario. Pero cualquier propuesta tiene que estar basada en la evidencia, no puede haber otros criterios. Lo que no sé todavía es qué hará el nuevo ministro, tendrá que comparecer en la Comisión y el pleno y decir qué piensa de diferentes temas. Hay que ver también qué modelo sanitario quiere Unidas Podemos. Es importante el asunto de los medicamentos, los genéricos, las vacunas, las nuevas especialidades y muchos cambios de paradigmas.