Los productos médicos de calidad falsificados y los subestándar (los que están autorizados pero no cumplen las normas de calidad o sus especificaciones) suponen un riesgo muy importante para la salud pública que no tiene fronteras. La fabricación, distribución y venta de estos productos es un negocio ilegal muy lucrativo que supone una amenaza mundial para la salud.
La colaboración entre las autoridades es clave para mejorar la efectividad de las actuaciones y por ello en 2012, la 65ª Asamblea Mundial de la Salud estableció un mecanismo de colaboración internacional entre Estados miembros, cuya meta es promover la prevención y el control de los productos médicos SF con el fin de proteger la salud pública y fomentar el acceso a productos médicos asequibles, seguros, eficaces y de calidad.
El mecanismo de Estados miembros dispone de un Consejo Directivo integrado por el presidente y dos vicepresidentes de cada región OMS. España, a través de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), preside desde enero de 2017 y hasta el final de 2018, las reuniones de este Consejo Directivo así como las reuniones plenarias anuales de este mecanismo, en representación de la región europea.
La Aemps ha desarrollado y coordinado desde el año 2008 estrategias cuatrienales que complementan la regulación nacional, derivada de la normativa europea frente a la falsificación de medicamentos
Uno de los principales logros del mecanismo ha sido el consenso en las definiciones de medicamento falsificado y subestándar, aspecto clave para las actuaciones internacionales de colaboración frente a estos productos entre los más de 150 países pertenecientes a la OMS.
En la reunión plenaria que se celebra estos días en Ginebra se ha aprobado la nueva lista de actividades del mecanismo de Estados miembros para el periodo 2018-19 y en ella cabe destacar el diseño de estrategias dirigidas a la prevención y reducción del riesgo de la venta a través de Internet de productos médicos, dado que esta es la vía principal por la que actualmente ciudadanos de todo el mundo pueden acceder a medicamentos ilegales y falsificados.
España, es un país líder en la Unión Europea en esta lucha y cuenta con una estrategia propia. La Aemps, ha desarrollado y coordinado desde el año 2008, estrategias cuatrienales que complementan la regulación nacional, derivada de la normativa europea frente a la falsificación de medicamentos, posibilitando un enfoque que favorece las actuaciones de todos los sectores implicados. La Estrategia Frente a Medicamentos actualmente en vigor cubre el periodo 2016-2018, siendo esta su tercera edición.