Uno de los virus del herpes, el citomegalovirus, es un patógeno común en los humanos, con una alta prevalencia según aumenta la edad de la persona y que no genera ningún tipo de síntomas. Sin embargo, según ha descubierto un equipo de investigación de la Universidad de Córdoba y del Instituto de Investigaciones Biomédicas Maimónides (IMIBIC), tiene la capacidad de debilitar y deteriorar el sistema inmunológico, atacando especialmente los linfocitos T.
Los linfocitos T son las células del sistema inmunológico encargadas de defenderse de los virus y las alteraciones celulares que se producen en los procesos cancerígenos. Conocidas como las células asesinas, son capaces de "recordar" y reconocer al "enemigo" de una forma que acorta sus tiempos de respuesta en caso de reinfecciones.
Con el paso de la edad, pero también por la acción de algunos patógenos, la eficacia del sistema inmune se va deteriorando. Uno de estos patógenos es el herpes virus citomegalovirus. "Este virus, a diferencia de otros, tiene un fuerte impacto en el sistema inmunológico. Lo desgasta considerablemente, ya que genera mucha memoria, por lo que hay que vigilarlo constantemente", señala el profesor Rafael Solana, investigador del estudio.
Capaz de provocar diferentes trastornos vasculares, e incluso de aumentar en un 20% las posibilidades de padecer una enfermedad cardiovascular
Este desgaste es independiente al estado del paciente o de su edad. Tal y como señala otra de las autoras del estudio, la Dra. Alenjandra Pera, la infección por este virus en algunas personas conduce a la expansión de células proinflamatorias y proaterogénicas; es decir, capaz de provocar diferentes trastornos vasculares, e incluso de aumentar en un 20% las posibilidades de padecer una enfermedad cardiovascular. "No todas las personas que contraen el virus generan este tipo de células, pero en las que lo hacen, se acumulan y, cuando superan un umbral, un porcentaje, pueden causar problemas graves".
Por ello, los investigadores recomiendan que los tratamientos inmunológicos consideren "tanto la edad como la infección por el citomegalovirus". "La asociación de estas expansiones de células T con la infección y la enfermedad por CMV subraya la necesidad de considerar la serología del CMV en cualquier estudio sobre inmunosenescencia y enfatiza que el precio de la protección inmunológica es siempre cierto grado de inmunopatología".