El virus de inmunodeficiencia humana (VIH) es una enfermedad que ha dejado una profundad huella en la sociedad. Aunque se han logrado importantes avances en el tratamiento y prevención, todavía haygrupos vulnerables que se enfrentan a desafíos únicos.
Entre ellos encontramos a los niños y adolescentes con VIH, quienes han tenido que afrontar desde temprana edad, los retos físicos emocionales y sociales asociados a esta condición. Según Iván López Garrido, psicólogo y persona nacida con VIH, el impacto psicológico en niños y adolescentes que nacen con el virus es significativo, pero no por la propia enfermedad “El principal reto es el propio estigma” afirma el Dr. Garrido.
El impacto psicológico en niños y adolescentes que nacen con el virus es significativo, pero no por la propia enfermedad “El principal reto es el propio estigma” afirma el Dr. Garrido
El Dr. Garrido nos cuenta como nacer con VIH “Es algo que dede el punto de vista europeo ya casi no sé da”, pero que sin embargo la preocupación aumenta y el como abordar el tema rodeado de estigma se complica en los casos donde la transmisión es a través del contacto sexual "Un 17% de los niños en España tiene VIH por transmisión sexual por lo que se le suma que hay un abuso y un maltrato detrás del diagnóstico, y la situación psicosocial se complica.”
En el caso del psicólogo Iván López Garrido, nacido con VIH, nos cuenta como vivió y entendió el VIH en su infancia. Afirma que no entendía nada, pero, él prefería no preguntar para evitar el disgusto de sus abuelos. “Al final se murió su hija y su nieto estuvo a punto de morirse, entonces yo desarrolle un rol del cuidado brutal y decidí no contar nada a nadie y hacer que ellos no sufrieran”
El Dr. Garrido no entendía nada, sólo sabía que tenía que ir al médico frecuentemente y desde pequeño ante la falta de información pensaba que iba a morir. "Empecé a leer prospectos y llegue al colegio contando que me iban a hacer un trasplante de hígado y que me iba a morir". Ese fue el momento en el que se enteró de que tenía VIH, y de que iba a poder tener una vida normal. "Yo lloré muchísimo y todo el mundo pensó que yo lloraba por la noticia, porque no era capaz de asimilarla, pero yo lloraba porque yo tenía claro que me iba a morir. Rercuerdo que para mí fue un disgusto grandísimo porque yo ya tenía súper asimilado que yo no tenía que estudiar ni ser adulto, y me impactó el hecho de no tener que morirme”.
Al hablar de las dificultades que tienen que afrontar los niños que viven con VIH, el Dr. Iván afirma que son los padres o tutores “sobre todo de la familia porque influye mucho cómo la familia lo viva y cómo el infante lo va a vivir". "Los padres no están preparados, y el niño al final es el que mejor lo ve, porque lo ve como un juego", continúa.
"Los padres no están preparados, y el niño al final es el que mejor lo ve, porque lo ve como un juego".
Iván López hace hincapié en que el estigma es el problema principal, en cómo desde el principio de su vida son juzgados y avasallados por la sociedad, y como desde pequeños notan la falta de un espacio donde poder hablar abiertamente sobre su patología. “Creo que el reto está en la sociedad, en replantearnos por qué no se les da a esas personas un espacio seguro, a esas 150 mil personas que tienen VIH en España, para que tu mejor amigo, tu pareja, tu colega te diga 'tengo VIH'".