El repunte de al menos tres enfermedades infecciosas y víricas en Venezuela refleja el debilitamiento de su sistema sanitario. Los especialistas aseguran que la fuerte presencia de la difteria, la malaria y el sarampión se debe, entre otras causas, a la poca vigilancia y a la falta de prevención.
Respecto a la difteria, enfermedad que resurgió en el estado Bolívar, en el sur de Venezuela, se ha extendido a otros territorios, incluso al centro y norte del país, debido a que no está siendo controlada, señalaron a Efe médicos de la localidad. "La difteria en Venezuela no se presentaba desde el año 1992", dijo a Efe la especialista en enfermedades infecciosas Ana Carvajal, miembro de la Red Defendamos la Epidemiología, una organización no gubernamental que fue la primera en informar de su reaparición en 2016 y que ha contabilizado cerca de 450 casos.
Por otra parte, una pediatra del Hospital Raúl Leoni de Bolívar, que prefirió no ser identificada, afirmó a Efe que llevan "más de un año con la difteria porque no se han tomado medidas. En este mes (septiembre) en este hospital fallecieron cuatro niños". La médico, quien aseguró que los responsables del centro no permiten a su personal hacer declaraciones, explicó que han recibido "incalculables" casos de malaria, de difteria y unos pocos de sarampión, del que hace unos días se alertó sobre su reaparición.
En cuanto a la malaria, la red de epidemiología sostiene que está totalmente "descontrolada" desde hace cuatro o cinco años, y en el caso del sarampión, cuya última epidemia importante se registró en 1994 se han contabilizado, desde julio de este año y hasta el 19 de septiembre, 38 casos en varios municipios de Bolívar. Se prevé "que esta epidemia -de sarampión- pudiera ser importante, ante la poca vigilancia que hay", dijo Carvajal, que explicó que esta es una enfermedad "severa" que se puede complicar "con neumonía", puede presentar "ceguera" e "incluso llevar a una situación en la que se necesite terapia intensiva". Además -agregó- quienes se ven afectados necesitan de un "tratamiento específico", algo que preocupa debido a que en Venezuela hay una grave escasez de medicinas y material médico desde hace al menos tres años.
Bolívar es el epicentro de la reaparición de estas enfermedades, ya que en este estado coinciden varios factores
Según los especialistas, Bolívar es el epicentro de la reaparición de estas enfermedades, ya que en este estado coinciden varios factores, como la "falla en la cobertura de vacunación", hay "muchísima pobreza, un sistema sanitario debilitado, una alta movilidad poblacional". Además es "una zona de minería ilegal", agregó Carvajal, una afirmación en la que también coincidió con la de la pediatra del centro de salud de referencia de ese estado que no quiso ser identificada y que insistió en que "no se fumiga, no se hacen campañas de vacunación ni de medidas preventivas".
De acuerdo con el epidemiólogo Luis Miranda, que trabaja en la localidad de Bolívar llamada Caicara del Orinoco, el caso de la malaria "está en este momento con una trasmisión tremenda", "De cada 100 muestras que se toman -en Bolívar- 90 salen positivas", aseguró a Efe. Las autoridades venezolanas publicaron el pasado mayo un informe epidemiológico después de tres años sin dar a conocer este documento, en el que se reconocen 324 casos de difteria y 240.613 de malaria durante el año 2016. Este informe que no tiene registros de sarampión fue publicado durante la gestión de Antonieta Caporale como titular del Ministerio de Salud, y días después fue destituida de su cargo.
Además, a la reaparición de estas enfermedades se añaden los casos de zika que en 2016 se cifraron en 59.348, según el Ministerio de Salud, y de microcefalia de la que no se conocen datos exactos. El resurgimiento de estas enfermedades ha llevado a los médicos venezolanos a alertar a través de protestas y ruedas de prensa, entre otras medidas, ante el temor de su gran expansión. El Parlamento venezolano, de mayoría opositora, iniciará una investigación sobre la reaparición de estas afecciones.