Según las últimas cifras aportadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la tercera causa de muerte no naturalen niños menores de cinco años son los atragantamientos. Unos datos que superan a las muertes por accidentes de tráfico y representan hasta el 17% de los fallecimientos no naturales en este rango de edad.
En 2020, 12 niños fallecieron por ahogamiento, asfixia o sofocación en España. Y es que, los cuatro primeros minutos durante el ahogamiento son claves para evitar las lesiones irreversibles en el cerebro. Mientras que hasta ocho minutos son necesarios para impedir la muerte cerebral en niños.
EL NUEVO COMITÉ DE SOPORTE VITAL PARA ENSEÑAR PRIMEROS AUXILIOS
Ante ello, la Asociación Española de Pediatría (AEP) ha decidió crear un Comité de Soporte Vital (CSV) para prevenir la desinformación entorno a la asfixia por alimentos. Compuesto por un equipo de pediatras expertos en urgencias, endocrinología, neurología, neonatología, traumatología, cirugía, atención primaria y reanimación cardiopulmonar que trabajar para crear guías y protocolos de actuación dirigidos a familias y profesionales.
Frutos secos y uvas, las “trampas” de asfixia para niños en las Navidades
La AEP resalta el papel de los frutos secos en nuestra dieta. Y es que, se trata de uno de los alimentos más implantados en nuestras comidas y cenas navideñas. No solo son uno de los favoritos en las mesas, sino que son uno de los alimentos que más atragantamientos provoca.
Tal y como advierte el doctor Carlos de la Torre, cirujano pediátrico del Hospital Universitario La Paz: “Los frutos secos deberían llevar la misma advertencia que los medicamentos: tienen que mantenerse fuera del alcance de los niños, sobre todo las pipas, los cacahuetes y los anacardos”.
UVAS PELADAS Y DESCUARTIZADAS PARA LOS NIÑOS ESTA NOCHEVIEJA
El Dr. De la Torre recuerda el fallecimiento de un menor en la Nochevieja de 2019. Unas uvas fueron el desencadenante de esta tragedia que se repetía en 2022 con otro menor. Las estadísticas apuntan a que este tipo de tragedias suelen ser en presencia de, al menos, un adulto. Es por eso, que los expertos recomiendan vigilar y quitar tanto la piel y las pepitas de las uvas de cara a esta Nochevieja.
La tráquea infantil tiene un diámetro similar al de su dedo meñique, es por eso que conviene ofrecerle al niño trozos muy pequeños para prevenir cualquier accidente. Con las uvas, lo que sucede es que, la piel se puede resbalar fácilmente por la faringe y llegar a la entrada de la tráquea, donde puede quedarse adherida.
CUIDADO CON ESTOS OTROS OBJETOS
Otras de las advertencias que hace la AEP de cara a estas Navidades son objetos como los globos, las pulseras de cuentas, juguetes pequeños, pilas de botón, decoraciones pequeñas (que además pueden provocar quemaduras en el esófago). Y otros alimentos como los caramelos duros de las cabalgatas o las alubias, que se pueden inflar con la humedad de la saliva y la tráquea.
CÓMO ACTUAR ANTE UN ATRAGANTAMIENTO
Cuando se este dando un bloqueo del aire hacia los pulmones por la obstaculización de un objeto o alimento, debemos seguir las siguientes indicaciones facilitadas por la AEP:
1. Llamar a emergencias (112)
2. Mantener la calma y no tocar o agitar al niño. Hay que animarle a toser.
3. Si la tos no facilita la expulsión del objeto succionado, podemos tratar de extraer con nuestras manos el objeto. Si no podemos sacarlo sin empujarlo hacia dentro o el niño tiene menos de un año, mejor no intentarlo.
4. Inclinar al niño hacia delante y darle cinco golpes secos en la espalda, justo entre los omoplatos.
5. Si nada de lo anteriormente mencionado funciona, probaremos con las maniobras de Heimlich, pero solo en niños mayores de un año.
MANIOBRA DE HEIMLICH
1. Abraza al niño por detrás, desde su altura. También puedes subirle a una silla o arrodillarte.
2. Cierra la mano hasta formar un puñoy colócalo, con el pulgar hacia el estómago del niño entre su ombligo y la punta inferior del esternón.
3. Con la otra mano, agarra el puño y comprime rápidamente hacia adentro y hacia arriba, para que el objeto sea expulsado.
4. Repítelo tantas veces como sea necesario.