Las sinergias entre la lucha contra el VIH y contra la hepatitis Cson importantes, sobre todo en las ciudades. Ambas infecciones comparten vías de transmisión y grupos de riesgo. Aunque las tasas de coinfección han disminuido enormemente gracias a la universalización del tratamiento de la hepatitis C con antivirales deacción directa (ADD), que curan la infección, en las personas con VIH las tasas de reinfección por hepatitis C son mayores que en la población general (pues ambas infecciones comparten también el hecho de que no existe, hoy por hoy, una vacuna eficaz y la reinfección es posible).
Ante este escenario y la confluencia de objetivos, ambos movimientos de lucha han decidido integrar esfuerzos en materia de sensibilización, prevención, diagnóstico temprano y abordaje de poblaciones vulnerables. El objetivo es acelerar las respuestas urbanas a ambas infecciones, alcanzando las metas marcadas por la OMS: en el caso del VIH, 95% de diagnóstico, 95% de tratamiento y 95% de pacientes con carga viral indetectable en 2025; en el caso del VHC, la eliminación de la hepatitis C antes de 2030, objetivo que, no obstante, España confía en alcanzar en 2024.
Ambas infecciones comparten vías de transmisión y demandan un abordaje específico en poblaciones vulnerables
Para ello, han establecido un acuerdo la Asociación Internacional de Proveedores de Atención al SIDA (IAPAC) y la Alianza para la Eliminación de las Hepatitis Víricas en España (AEHVE). A través de su participación en la red Fast-Track Cities, IAPAC lidera la lucha contra el VIH en más de 390 ciudades y municipios de todo el mundo, mientras que el programa #hepCityFreede AEHVE está ya en marcha en diez ciudades españolas y acaba de dar el salto a América Latina (Uruguay). Tanto el Dr. Javier García-Samaniego Rey, coordinador de la AEHVE, como el Dr. José M. Zuniga, presidente y CEO de IAPAC, están convencidos de que uniendo fuerzas ambos programas podrán colaborar de forma más eficaz a sus respectivos fines sociales.
“Estamos muy contentos de poder aprovechar la experiencia de IAPAC en la lucha contra el VIH para la hepatitis C”, ha afirmado García-Samaniego, que ha insistido en que “el papel de las ciudades es fundamental para acelerar la eliminación de esta infección, pues, con una alta densidad de población, no solo representan la mayor proporción de personas con hepatitis C, sino que se ha constatado que el riesgo y la vulnerabilidad a la infección y reinfecciones son, asimismo, mayores en el entorno urbano y los nuevos casos se concentran en sus barrios, áreas metropolitanas y colectivos más desfavorecidos”.
El acuerdo nace del deseo de ambas partes de acelerar las respuestas urbanas a ambas infecciones a través de sus respectivas redes
Por su parte, el presidente de IAPAC ha destacado en que, aun sin tener las competencias sanitarias, las ciudades tienen mucho que decir y aportar en el objetivo de la eliminación de la hepatitis C, como lo han tenido en la lucha contra con el VIH. “Los ayuntamientos, que son las administraciones más cercanas al ciudadano, juegan un papel muy relevante en la concienciación general y también para llegar, desde los servicios comunitarios y junto a los agentes y ONGs que trabajan en la ciudad, a aquellos colectivos de mayor riesgo. Esto lo hemos comprobado ya en la lucha con el VIH y ahora pretendemos aprovechar el bagaje de la AEHVE y su programa de ciudades para extender los objetivos de nuestro movimiento de ciudades incorporando también la hepatitis C”.
El acuerdo alcanzado por ambas organizaciones integra en concreto los siguientes propósitos y líneas de colaboración: la promoción y asistencia técnica a los departamentos de salud municipales para el diseño e implementación de la Hoja de Ruta para la Eliminación del Virus de la Hepatitis C (VHC) en las ciudades; el desarrollo de "colaboraciones de aprendizaje" para profesionales de la salud; la promoción conjunta de acciones con motivo de días mundiales; y la colaboración en la recogida de indicadores para conocer el progreso de las ciudades en la consecución de los objetivos de eliminación del VHC marcados por la OMS. Asimismo, el acuerdo persigue incorporar modelos de atención innovadores e integrar a todos los agentes de la Administración y no gubernamentales involucrados en los objetivos establecidos.