El VIH ha pasado de ser una enfermedad mortal a otra manejable. Un hecho que no habría sido posible sin la importante evolución de los tratamientos. La transformación ha sido tal que se ha pasado de tratamientos complejos a regímenes sencillos de pastilla única con pocas toxicidades y mejor tolerados como la triple terapia. “La triple terapia ha permitido transformar la vida de los pacientes convirtiendo la enfermedad de mortal en crónica.”, ha señalado el Dr. Santiago Moreno, del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid.
“Hay que conseguir que el 90 % de los diagnosticados con VIH tengan una buena calidad de vida”
Fruto de esta evolución, la calidad de vida de los pacientes ha mejorado y sus necesidades y prioridades han cambiado. Por ello, es el momento de ir más allá y controlar cuáles deben ser los siguientes pasos en el abordaje de esta enfermedad. A este respecto Moreno ha incidido en la necesidad de añadir al triple objetivo de 90-90-90 marcado por la ONUSIDA para 2020, un cuarto 90: “los profesionales queremos ir más allá, hay que conseguir que el 90 % de los diagnosticados tengan una buena calidad de vida”.
MoVIHmiento RET DE GILEAD
Consciente de todo ello, la biofarmacéutica Gilead ha puesto en marcha un proyecto multidisciplinar denominado MoVIHmiento RET, “gracias a la colaboración de distintos agentes involucrados en el abordaje del VIH analizaremos y redefiniremos cuáles deben ser los parámetros a tener en cuenta, más allá del control virológico, para garantizar el éxito terapéutico en los pacientes con VIH, ha afirmado Amaya Echevarría, Executive Director de la Unidad de Negocio de VIH de Gilead España.
El MoVIHmiento RET pone al paciente en el centro del proyecto convirtiéndolo en una parte más activa del proceso
La iniciativa, que permitirá una discusión de todos los colectivos, facilitará poner al paciente en el centro del proyecto con la finalidad de que se convierta en una parte más activa del proceso y tenga un peso aún mayor en cuanto a toma de decisiones sobre su salud a largo plazo.
Desde el punto de vista médico, el programa incluye la celebración de reuniones con profesionales sanitarios de primer nivel para discutir el impacto de los tratamientos en la salud del paciente, tanto en el momento actual, como en el futuro. Así, se analizarán los beneficios del inicio rápido del tratamiento, el efecto del proceso inflamatorio en el paciente VIH, las posibles afecciones del sistema nervioso central o la relevancia de las comorbilidades en la salud cardiovascular.
Por su parte, el Dr. Josep María Llibre, del Hopsital Universitario Germans Trias i Pujol de Badalona, ha subrayado la importancia de este proyecto para “desarrollar y publicar recomendaciones que permitan al profesional sanitario evaluar el éxito terapéutico en los pacientes con VIH de una forma acorde a los estándares actuales”.
EN BUSCA DEL CUARTO 90
Para avanzar en el cuarto objetivo 90 la Dra. María José Fuster de Seisida, ha incidido en la necesidad de utilizar los cuestionarios de síntomas reportados por el paciente (PROs) a la hora de identificar síntomas clínicos que normalmente el médico no observa durante la anamnesis habitual que realiza al paciente, “es necesario identificar y priorizar los problemas que afectan a la calidad de vida del paciente. Los PROs recogen su perspectiva sobre múltiples aspectos relacionados con la salud, ayudan a cribar y monitorizar, mejoran la comunicación y el compromiso entre paciente y profesional, por lo que resultan importantes para una atención centrada en el paciente”. En esta línea, Fuster identifica un nuevo reto, “tenemos que introducir estos cuestionarios en las prácticas clínicas con el único objetivo de mejorar”.