El Día Mundial de la Sepsis (que se celebra cada año el 13 de septiembre) es una iniciativa liderada por la Alianza Global de la Sepsis y tiene como principal objetivo poner en relieve la importancia de esta enfermedad que cada año se cobra un número muy importante de muertes con un impacto social y económico elevado. La Sociedad Española de Medicina Intensiva Crítica y Unidades Coronarias se ha adherido desde sus inicios a la iniciativa Surviving Sepsis Campaign promoviendo diferentes actividades con la participación de muchos servicios de medicina intensiva de todo el país.
"La SEMICYUC quiere mostrar su implicación en una enfermedad que puede afectar a cualquier persona y que constituye una de las patologías más frecuentes en las Unidades de Cuidados intensivos. El Día Mundial de la Sepsis constituye una oportunidad para que se aúnen los esfuerzos para luchar contra esta grave enfermedad y reducir el número de muerte evitables relacionadas", concluye María Cruz Martín Delgado, presidenta de la SEMICYUC.
¿QUÉ ES LA SEPSIS?
La sepsis es una dolencia crítica que se produce cuando el cuerpo, como respuesta a una infección, genera una respuesta inflamatoria que, en los casos más graves, provoca un fallo agudo de otros órganos que no necesariamente estaban relacionados con la infección original, provocando un shock o fallo multiorgánico que, en un número importante de casos, provoca la muerte.
Es una enfermedad tiempo dependiente, en la que los casos de éxito están directamente relacionados con la rapidez con la que se instaura el tratamiento. Por este motivo, "la sepsis debe tratarse como una emergencia, porque cada retraso en la administración de antimicrobianos y otras medidas apropiadas aumenta la tasa de mortalidad por hora", explica Ricard Ferrer. Las medidas propuestas recientemente por la Surviving Sepsis Campaign de aplicar un paquete de tratamiento en la primera hora después de identificar un episodio de sepsis puede contribuir a disminuir esta elevada mortalidad: medir el lactato inicial, obtener cultivos de sangre, administrar antibióticos de amplio espectro y fluidoterapia con vasopresores para corregir la hipotensión.
"La incidencia y mortalidad en España sigue siendo elevada a pesar de las medidas que se están tomando".
El reconocimiento precoz de los síntomas y el inicio de un tratamiento adecuado en las primeras horas pueden reducir la mortalidad de forma significativa. Los estudios muestran que los pacientes tratados de forma adecuada la primera hora sobreviven en un 80% de los casos incrementándose la mortalidad hasta el 15-20% a partir de las 12 primeras horas.
Se estima que cada año 27 millones de personas sufrirán un episodio de sepsis, cifra por encima de los casos de ictus, cáncer, infarto de miocardio y HIV. De estos pacientes fallecen 8 millones al año y los supervivientes pueden presentar importantes secuelas a largo plazo con alteraciones funcionales, cognitivas y mentales que impactan en su calidad de vida.
El vicepresidente de la SEMICYUC, Ricard Ferrer, comenta que "la incidencia y mortalidad en España sigue siendo elevada a pesar de las medidas que se están tomando. Los estudios epidemiológicos más recientes de nuestro país muestran una variabilidad importante. Bouza (BMC Infectious Diseases 2014) reporta una incidencia de 87 casos por 100.000 habitantes y año, y una mortalidad del 40%, mientras que datos más recientes (Yebenes; Ann. Intensive Care 2017) hablan de una incidencia de 212 casos por 100.000 habitantes y año, y una mortalidad del 19%."