Casi 5 mil niños nacen en España cada año con Trastornos del Espectro Alcohólico Fetal (TEAF). Concretamente, la prevalencia ronda entre el 4 y el 7%. Se sabe que esta cifra es especialmente importante entre los niños adoptados en países de Europa del Este, pudiendo llegar al 50%.
Existe evidencia clara sobre la capacidad del alcohol como teratógeno para interrumpir o alterar el desarrollo del embrión en cualquiera de las etapas de gestación. Es más, el consumo de alcohol durante el embarazo es la causa prevenible más importante de trastornos cognitivos en general y retraso mental en particular.
Pese a que puede ser 100% evitable, las cifras de consumo de alcohol durante el embarazo son altas. “En nuestro entorno, el 60% de las mujeres consumen alguna cantidad de alcohol durante el embarazo. Es una cifra muy importante”, asegura el Dr. Óscar García, miembro de Socidrogalcohol y médico en el Hospital Clínic de Barcelona.
"Aunque no se haya demostrado que una copa no tenga efecto, no significa que no haga nada"
El TEAF incluye cuatro posibles manifestaciones clínicas: Síndrome Alcohólico Fetal Completo, Síndrome Alcohólico Fetal Parcial, Trastorno del Neurodesarrollo Relacionado con el Alcohol y Malformaciones Congénitas o Defectos Fetales Relacionados con el Alcohol. El grado de afectación depende de muchos factores, pero en general se puede asegurar que el alcohol impide el desarrollo normal del cerebro, lo que provoca en la mayoría de los casos dificultades de aprendizaje, así como problemas de conducta y de integración social.
En este contexto, los TEAF presentan con frecuencia un infradiagnóstico o diagnóstico tardío, por lo que Sanidad ya reforzó las medidas de detección precoz en 2010 para favorecer el diagnóstico adecuado y poder establecer medidas preventivas y rehabilitadoras, a la vez que las Comunidades Autónomas han ido desarrollando paralelamente nuevos planes.
“En un estudio de prevalencia que realizamos desde el Hospital Sant Joan de Déu Barcelona y el Clínic se encontraron un 50% de niños afectados y un 20% que no teníamos la confirmación de consumo durante el embarazo, pero que si la hubiéramos tenido, también se habrían diagnosticado. Estas cifras resultaron alarmantes y se convirtieron en una señal de alarma. Desde entonces, ha ido creciendo la conciencia sobre esto y ahora se están haciendo cosas”, explica el Dr. García.
"Hay muchos niños que están sin diagnosticar"
"Nos hemos dado cuenta que, desde entonces, los Gobiernos se preocupan por esto y tienen muchas iniciativas. En este sentido, nosotros colaboramos con ellos a través de informes, campañas… Por ejemplo, tenemos una guía para las familias, las escuelas y los profesionales de la Generalitat. Se hacen cosas, pero hay más cosas que se podrían hacer, que dependen sobre todo de los policymakers".
Ante esto, el Dr. García tiene claro qué medidas se pueden establecer para disminuir la prevalencia de los casos, porque "hay muchos niños que están sin diagnosticar": aumentar la formación de los profesionales o la creación de unidades especializadas.
UN MENSAJE CLARO
“Siempre está el discurso de que tomar una copita no está mal y que es muy habitual durante el embarazo beber una copa de vino o una cerveza cada día. Pero hay que destacar que, aunque no se haya demostrado que una copa no tenga efecto, no significa que no haga nada. En experimentación animal sí se ha demostrada que tiene efectos”, alega el Dr. García.
“Durante el embarazo el único consumo seguro es ninguno”
Ya lo dicen las campañas que el Ministerio de Sanidad ha puesto en marcha, pero también lo dicen los expertos: “Durante el embarazo el único consumo seguro es ninguno”. Según Sanidad, “las mujeres embarazadas y las que desean quedarse embarazadas no deben consumir alcohol durante toda la gestación y desde que se planifica el embarazo”.
En relación a las mujeres que estén dando lactancia materna, la evidencia científica no permite identificar un nivel de riesgo cero o seguro en relación al consumo de alcohol. Por ello, la opción más segura para los bebés es que las mujeres lactantes no consuman alcohol.