El incremento del trasplante de progenitores hematopoyéticos (TPH) de donante no emparentado ha crecido un 29% con respecto a 2020, año en el que se redujo en un 2,5% por el impacto de la COVID-19. En el año 2021, España registró su máximo histórico de actividad de TPH, según el balance de datos de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) y que reconoce especialmente el esfuerzo realizado por los profesionales sanitarios para mantener e, incluso, reforzar este programa durante la crisis sanitaria generada por la COVID-19.
La adaptación a la situación epidemiológica explica por qué el trasplante de un donante familiar creció en 2020 y se redujo un año después, ya que la logística de este tipo de intervenciones es menos compleja al no depender de la identificación de un donante a través del Registro de Donantes de Médula Ósea (REDMO). En la actualidad, todos los pacientes que lo necesitan disponen de un donante adecuado gracias a las diferentes opciones de donación.
Es importante resaltar el crecimiento de este segundo tipo de trasplante, ya que ha aumentado un 10% con respecto al año anterior y un 12% si lo comparamos con la actividad registrada en 2019, antes de la pandemia de COVID-19
En total se realizaron 3.610 TPH –o de células madre de la sangre- que se obtuvieron de médula ósea, sangre periférica y sangre de cordón umbilical (SCU), lo que supone un crecimiento del 7% con respecto al año 2020. De estos trasplantes, 2.156 procedían del propio paciente (trasplantes autólogos) y 1.454 de un donante (trasplantes alogénicos). Es importante resaltar el crecimiento de este segundo tipo de trasplante, ya que ha aumentado un 10% con respecto al año anterior y un 12% si lo comparamos con la actividad registrada en 2019, antes de la pandemia de COVID-19.
La mejora de la actividad del trasplante alogénico se viene registrando desde hace más de una década, con un aumento del 67% desde 2011. Este éxito se enmarca dentro del Plan Nacional de Médula Ósea (PNMO) en el que se aúnan los esfuerzos de la ONT, las comunidades autónomas, sociedades científicas, asociaciones de pacientes y la Fundación Internacional Josep Carreras, que gestiona el REDMO, tras la firma del Acuerdo Marco entre esta entidad, el Ministerio de Sanidad y la ONT.
Se localizaron 1.696 donantes compatibles para 863 pacientes, lo que supone casi dos donantes por paciente
Por otra parte, España dispone de 64.109 unidades de SCU, un 8% de las almacenadas en el mundo (809.374), siendo el mayor registro de Europa y el tercero en el mundo, detrás de Estados Unidos y Taiwán. En 2021 se utilizaron 109 unidades de SCU para trasplante, 12 para pacientes nacionales y 117 para extranjeros. En los 17 casos de trasplante no familiar que se realizaron en nuestro país se empleó SCU de donantes de bancos públicos. No obstante, la actividad de trasplante de SCU se ha ido reduciendo a lo largo del tiempo, dejando paso a otros donantes alternativos como el donante no emparentado y el donante haploidéntico.
En 2021, se activaron 1.053 nuevas búsquedas de donante no emparentado para pacientes españoles. Se localizaron 1.696 donantes compatibles para 863 pacientes, lo que supone casi dos donantes por paciente. La mediana de búsqueda para encontrar un donante compatible el pasado año fue de 26 días y el 92% de los donantes se han localizado antes de dos meses.