El cáncer de mama es el tumor más frecuente entre las mujeres de todo el mundo, de hecho representa el 25% de todos los cánceres. Además, es la segunda casusa de muerte por cáncer entre las mujeres de los países más desarrollados, sólo por detrás del cáncer de pulmón. En el caso de España, el cáncer de mama debe ser un objetivo de salud prioritario, ya que es la primera causa de muerte por cáncer entre la población femenina del país. Tal y como recoge el Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama, formado por casi 800 expertos que trabajan en 180 hospitales de toda España, una de cada ocho mujeres sufrirá cáncer de mama a lo largo de su vida y cada año se diagnostican alrededor de 26.000 nuevos casos.
La supervivencia de las mujeres con cáncer de mama está condicionada por el subtipo y el estadio de la enfermedad. En España, la supervivencia es alta y sigue una evolución ascendente en el tiempo. Los datos apuntan a una supervivencia a cinco años algo superior al 80%. Esta evolución positiva, dicen los expertos, se debe a las mejoras que se han producido en los últimos años, como una mayor concienciación de las mujeres y el acceso a programas de cribado. Esto ha permitido que el 90% de las mujeres con cáncer de mama se diagnostiquen durante un screening de rutina y que el número de casos diagnosticados en una fase precoz haya aumentado un 15% frente a los nuevos casos con tumores más avanzados.
El 30% de las mujeres diagnosticadas en un estadio precoz de la enfermedad experimentará una recaída
A pesar de los datos positivos, los especialistas adviertes que todavía queda un camino por recorrer, ya que según diferentes estudios, el 30% de las mujeres diagnosticadas en un estadio precoz de la enfermedad experimentará una recaída de la misma con metástasis a distancia, lo que incidirá en una disminución de la supervivencia. De hecho, la mediana de supervivencia global de las mujeres que han recaído posteriormente es de 2,3 años y de 2,8 años para las diagnosticadas con metástasis de inicio.
Los profesionales sanitarios y los pacientes reivindican desde hace tiempo una mayor inversión en la financiación de proyectos de investigación contra el cáncer por parte de las administraciones públicas. Esta situación hace que sean las propias asociaciones creadas sin ánimo de lucro las que más lucha realizan hacia este camino.
Los actores implicados en el abordaje contra el cáncer de mama señalan también la necesidad de que las administraciones trabajen de forma coordinada en la interoperabilidad de la tarjeta sanitaria y la plena compatibilidad de las prescripciones y la historia clínica electrónica. Con ello se potenciaría el hecho de facilitar la cohesión y la sostenibilidad para que el sistema sanitario ofrezca una atención integral, personalizada, multidisciplinar, de calidad y de acceso universal y gratuito.