Las redes sociales son el espejo en el que los jóvenes se ven reflejados. Un espejo que proyecta ideales estéticos basados en una perfección irreal y cuyo uso puede generar un fuerte impacto en su autoestima, autoconcepto e imagen corporal. En muchas ocasiones, las redes sociales ejercen un papel clave en el desarrollo y mantenimiento de los trastornos de la conducta alimentaria (TCA), siendo en muchas ocasiones un factor precipitante de los mismos, fomentando en personas vulnerables la preocupación por el cuerpo, pero ¿existe una concienciación al hablar de los TCA en redes sociales o es una enfermedad tabú en este canal?
Lo cierto es que las redes sociales más usadas por los jóvenes (Twitter, Facebook, Instagram y TikTok) no permiten que se emita este tipo de contenido y es que cualquier audio o texto que contenga las siglas ‘TCA’ es eliminado por la propia plataforma. En el caso de que quieras buscar información sobre alguno de estos trastornos, la red social te recomienda que busques ayuda y te aconseja una asociación con la que puedes contactar.
Aun así, esto no significa que las personas no puedan compartir sus testimonios. Es el caso de Sara Gomez, una joven de 22 años que sufrió anorexia y cuyo canal de TikTok tiene casi 2 millones de seguidores. A través de sus vídeos narra su experiencia con esta enfermedad y ha comentado en más de una ocasión que ha sufrido una recaída. Además, ella sabe lo duro que es pasar por una enfermedad de este calibre y para dar más visibilidad y contar su proceso decidió abrirse un canal en YouTube.
Son muchos los profesionales que deciden aportar conocimiento para acabar con esta enfermedad tan peligrosa que principalmente afecta a adolescentes
Como ella, hay pocos casos en otras redes sociales que también dan el paso de contar su proceso de recuperación. Pero también hay otro personaje que juega un papel fundamental en este canal: los profesionales sanitarios. Psicólogos, médicos, enfermeros… son muchos los que deciden aportar conocimiento para acabar con esta enfermedad tan peligrosa que, en la gran mayoría de los casos, afecta a los adolescentes, principalmente a mujeres. Por eso, Instagram está lleno de recursos con imágenes de apoyo, comprensión y consejos dirigidas a todas aquellas personas que no se atreven a buscar ayuda.
Pese a este esfuerzo, los TCA siguen siendo poco visibilizados en estos canales. En parte, porque son uno de los causantes de esta enfermedad, según señalan los expertos. Por eso, muchos famosos han querido dar visibilidad a este tipo de patologías explicando públicamente que las han padecido o que las siguen sufriendo. Todos lo han hecho para poner de manifiesto que es algo más común de lo que se podría pensar, que no hay que culpar ni estigmatizar a quien lo sufre y que es importante pedir ayuda cuando uno lo necesite.
La más conocida es Demi Lovato. La cantante confesaba en 2017 que la comida era su mayor reto, pues había convivido con bulimia durante varios años. “El trastorno alimenticio siempre estará conmigo. Es algo contra lo que lucharé toda mi vida”, contaba en su documental autobiográfico 'Demi Lovato: Simply Complicated'. Desde entonces, no ha tenido ningún complejo en compartir recursos gráficos que muestren esta parte tan íntima de su vida y con la que lucha día a día.
@sgoomz Misma persona,mismo top,2 años de diferencia pero queriendome mas que antes❤️🩹 #fakebody#parati#recoveryispossible#greenscreenvideo♬ sonido original - Sara Gomez
Lady Gaga fue una de las primeras en este ámbito en declarar que sufrió un TCA. “Solía vomitar constantemente cuando estudiaba secundaria. Quería ser bailarina esquelética pero era un voluptuosa niña cuyo padre ponía albóndigas para cenar cada noche”, contó la cantante y actriz asegurando que había sufrido anorexia y bulimia desde los 15 años. Al igual que Lovato, Lady Gaga no se arrepiente de haberlo contado y ahora está segura de poder sentirse segura de sí misma.
Hay personas que cuentan su historia, profesionales que ayudan y famosos que visibilizan, pero estos esfuerzos, en ocasiones, no son suficientes para solventar los posibles daños que estas redes pueden ocasionar a las personas afectadas por TCA. Además, los usuarios de estas redes sociales no llegan a entender que se trata de una enfermedad grave. Por eso, muchos comentarios que parecen inocentes son los que más daño causan.
Sara Gómez ha tenido que responder a comentarios como “estás más gorda” o “has vuelto a adelgazar”. Incluso cuando ha tenido una recaída ha tenido que leer “qué triste, eras mi admiración”. Pero a ella esto no le ha frenado para seguir dando a conocer los TCA y cómo alguien puede sobrevivir a esto. Ella lo tiene claro: con mucha ayuda psicológica y médica. Ahora es una mujer que sigue recuperándose de un TCA, pero sabe que cada vídeo que sube a TikTok es dar un paso más en su recuperación