El sueño resulta esencial para la salud de las personas y su buen funcionamiento diario en sus actividades cotidianas. Esta importancia de un buen descanso resulta especialmente significativa para aquellos que practican deporte o actividad física más intensa. No en vano, dormir bien y adecuadamente es fundamental para el rendimiento deportivo, para la recuperación física, fisiológica, metabólica y mental. De este modo, dormir las horas necesarias y, además, tener un sueño de calidad tiene consecuencias positivas en los deportistas. Así lo afirma el doctor Eduard Estivill, experto en el diagnóstico y tratamiento de las alteraciones del sueño y responsable de la Unidad de Gestión del Descanso de Olympia Quirónsalud. “Mejora la capacidad de aprendizaje, disminuye la probabilidad de tener lesiones deportivas, aumenta el estado de ánimo y la motivación, así como la recuperación muscular y energética”.
Hay estudios que ponen de manifiesto que el sueño es la mejor estrategia aislada disponible para la recuperación de los deportistas de élite. “El sueño forma parte del entrenamiento invisible y silencioso”, destaca el doctor Estivill. Según el experto, es fundamental dormir bien en periodos de entrenamiento, durante la preparación y recuperación de competiciones y en periodos de rehabilitación tras una lesión. Por otro lado, los datos científicos demuestran que existe una privación de sueño importante entre los deportistas debido a las dificultades en los horarios de entrenamiento. “Los entrenamientos y las competiciones producen un desgaste físico, lo que produce un sueño fragmentado poco reparador y, en horarios nocturnos de entrenamiento, producen una disrupción del funcionamiento del ritmo circadiano”, señala el doctor.
“Dormir es un proceso de reparación de lo que hemos hecho durante el día, y específicamente se produce la reparación de las fibras musculares”
Tal y como explica el doctor Francisco Segarra, codirector de la Unidad de Gestión del Descanso de Olympia, uno de nuestros programas del sueño está indicado para mejorar el rendimiento deportivo no solo de los deportistas profesionales, sino que también del amateur. “Nuestro objetivo en la gestión del sueño es optimizar la eficiencia de los entrenamientos, planificar el óptimo rendimiento en competiciones, así como paliar los efectos de los viajes”. Por ello, los integrantes de la unidad de Gestión del Descanso de Olympia estudian la calidad del sueño durante los días de entrenamiento y de competición, las horas reales de sueño, los ritmos circadianos mediante sensores, y determinación de su cronotipo (matutino o vespertino) para optimizar su rendimiento y poder diseñar la estrategia adecuada de entrenamiento.
El doctor Estivill subraya la importancia de la preparación del sueño antes de los eventos deportivos y/o competitivos, “y también la recuperación del sueño después de ello”, reconoce el experto, contrariamente a lo que se piensa, ya que el sueño empeora después de un ejercicio intenso. Este investigador del sueño en los deportistas y ritmos circadianos, insiste en afirmar que el sueño es parte del entrenamiento de todo deportista. “Dormir es un proceso de reparación de lo que hemos hecho durante el día, y específicamente se produce la reparación de las fibras musculares”, concluye.