La Sociedad Española de Reumatología (SER), dentro de la campaña ‘Reumafit’ ha puesto de manifiesto la importancia de la actividad física en pacientes con enfermedades reumáticas. Estas dolencias tienen un elevado impacto en la sociedad y se estima que en torno al 80% de las personas sufrirán algún dolor lumbar el algún momento de su vida. Asimismo, un tercio de la población afectada por este dolor sufrirá una recaída en el transcurso de un año.
El documento redactado por la SER niega las falsas creencias con respecto a los dolores lumbares y la necesidad de un reposo prolongado. “Se ha demostrado que evitar el reposo en cama e intentar volver lo antes posible a la actividad facilita la recuperación”, explica la Dra. Raquel Almodóvar, reumatóloga del Hospital Universitario Fundación Alcorcón (Madrid) y una de las coordinadoras de esta iniciativa.
La campaña de la SER nació en 2020 con el objetivo de poner en relieve el ejercicio físico para personas con enfermedades reumáticas, para mejorar la patología y prevenirla en la población en general. Reumatólogos y rehabilitadores han trabajado materiales como guías específicas sobre enfermedades reumáticas para tratar estos temas. Reumafit también cuenta con material multimedia a disposición de los pacientes realizado con ayuda de varias asociaciones de pacientes.
"Además, en un 11-12% de la población el dolor lumbar producirá, en alguna ocasión, una limitación en sus actividades"
“Se estima que un 23% de la población general tendrá en algún momento de su vida algún episodio de dolor lumbar crónico, es decir, dolor persistente de más de 3 meses de duración. Además, en un 11-12% de la población el dolor lumbar producirá, en alguna ocasión, una limitación en sus actividades. Estas cifras hacen que el dolor lumbar sea la principal causa de discapacidad en España y a nivel mundial, sobre todo en adultos en edad laboral, lo cual refleja la importancia de abordar dicha manifestación y, en la medida de lo posible, intentar prevenirla”, sostiene la experta.
El tratamiento de la lumbalgia dependerá de cada paciente en función de la causa, “ya que el tipo de ejercicio se debe individualizar en cada caso”, señala la especialista en Reumatología. Un 15% de los casos de dolor lumbar está relacionado con un cuadro clínico concreto, como la espondiloartritis, patología discal, lumbociática, estenosis de canal o fractura vertebral osteoporótica, entre otras; mientras que menos de 1 de cada 1.000 son casos de dolor lumbar como signo de alerta de un problema grave.
“Un importante avance es que se sabe que, en la mayor parte de los casos, no hay un daño permanente de alguna de las estructuras que constituyen la columna vertebral y que sea responsable del dolor”
Lo más común es el dolor lumbar inespecífico, es decir, no se conoce la causa ni la estructura que está causando el dolor. En este sentido, la doctora añade que “un importante avance es que se sabe que, en la mayor parte de los casos, no hay un daño permanente de alguna de las estructuras que constituyen la columna vertebral y que sea responsable del dolor”.
En un primer momento, para la recuperación del dolor inespecífico, puede ser necesario el reposo durante unos días, así como realizar pequeños paseos que se incrementarán poco a poco. Una vez se supere la etapa de dolor intenso, el paciente debe recibir un listado de ejercicios de fortalecimiento y equilibrio, con el objetivo de mejorar la fuerza muscular y disminuir el riesgo de nuevas caídas. Algunos ejemplos son el ejercicio de báscula pélvica en el suelo y el ejercicio de elevación del tronco tumbado.
ACTIVIDAD FÍSICA FRENTE A REPOSO PROLONGADO
El dolor lumbar persistente no está relacionado con un daño importante en los tejidos, según explican los expertos. Si el dolor persiste en el tiempo, sí puede ser preocupante, aunque rara vez es peligroso. El dolor lumbar combinado con movimiento no significa que dañe la espalda y tener dolor lumbar intenso no significa que el daño de la columna esté aumentando.
"La actividad física tiene un efecto beneficioso sobre todos los tejidos del organismo y, especialmente, en los que forman el aparato locomotor"
Asimismo, el paciente debe combinar el dolor lumbar con actividad física antes que realizar un reposo prolongado para facilitar la recuperación. “La actividad física tiene un efecto beneficioso sobre todos los tejidos del organismo y, especialmente, en los que forman el aparato locomotor. Se ha demostrado que la actividad física y el ejercicio son un aspecto esencial para la prevención y el tratamiento del dolor lumbar. Efectuar ejercicio físico de tipo aeróbico o cardiovascular (caminar, correr, nadar…) de forma habitual, así como realizar ejercicios específicos para fortalecer los músculos de la cadera y del tronco, disminuye el riesgo de tener dolor lumbar (posee un efecto preventivo)”, añade la dra. Almodóvar.
Además, los expertos recomiendan que, las personas con dolor lumbar deben sacar el máximo partido a las medidas sencillas que carecen de efectos secundarios y a lo que puedan recurrir de forma independiente, ya sea la aplicación de calor local, los programas de ejercicio terapéutico o caminar, entre otras.