Este martes se ha celebrado el Congreso Internacional de la Sociedad Respiratoria Europea. Entre los estudios presentados destaca una investigación realizada por la Dra. Cristina Longo en el Centro Médico de la Universidad de Ámsterdam que pone el foco en la relación entre la obesidad infantil y el tratamiento de esteroides inhalados.
Según los resultados, los niños asmáticos tienen menos probabilidades de responder a la medicación con esteroides inhalados si tienen sobrepeso u obesidad, y esto conduce a ataques de asma más frecuentes. “Sabemos que los niños con el asma, cuyos síntomas están mal controlados, tiende a aumentar de peso. Esto posiblemente se deba a que hacen menos ejercicio. Los niños con asma que tienen sobrepeso u obesidad tienen más probabilidades de tener síntomas peores a pesar de estar en el tratamiento recomendado de corticosteroides inhalados, lo que dificulta no solo lograr un peso saludable sino también mejorar su calidad de vida", explica la doctora.
"La proporción de niños con una respuesta deficiente a los ICS aumentó más del doble por cada aumento de una unidad en la puntuación z del IMC”
El estudio recogió datos de 1511 niños con asma de entre dos y 16 años. Todos los niños tenían un tratamiento de corticosteroides inhalados. Según explica la Dra. Longo, “En los 1511 niños con asma que tomaban CSI, el puntaje z del IMC promedio fue de 0.69 y 318 (21%) eran obesos. Aunque la respuesta deficiente a los ICS osciló entre el 20% y el 80% entre los cinco estudios internacionales, mostramos sistemáticamente que la proporción de niños con una respuesta deficiente a los ICS aumentó más del doble por cada aumentode una unidad en la puntuación z del IMC”.
En una presentación relacionada con la reunión, la Dar. Longo investigó también si las variantes genéticas que se habían mostrado anteriormente asociadas con una respuesta deficiente a los CSI eran más comunes en los niños con asma obesos que en los no obesos. “Descubrimos que una variante particular en el gen NEGR1 era significativamente más común en niños obesos que en niños no obesos. Esta variante se ha relacionado con la disfunción de una hormona llamada leptina que regula la sensación de hambre. Esto podría sugerir que la disfunción de la leptina podría ser un culpable potencial de la mala respuesta de los CSI en niños con asma relacionada con la obesidad ”, dijo.
De esta forma, la investigación arroja luz sobre las razones del porqué algunos niños no responden a su inhalador y ayudará a que los médicos adapten "un enfoque más personalizado para tratar a los niños con sobrepeso y obesidad". "Nuestros resultados también podrían ser el catalizador que los padres y sus hijos necesitan para modificar su dieta y aumentar el ejercicio. Esto podría mejorar el estado del IMC del niño y su respuesta a los esteroides inhalados ".