El complejo hispitalario Ruber Juan Bravo, del grupo Quirónsalud, ha incluido en su tratamiento del esófago de Barret el tratamiento endoscópico mediante radiofrecuencia o sistema HALO con gran eficacia, 9 de cada 10 pacientes recuperan la muscosidad normal.
El esófago de Barrett es una enfermedad causada habitualmente por el reflujo gastroesofágico, en la que la mucosa de revestimiento interno normal se cambia por otra más gruesa y resistente al ácido gástrico, pero enferma. Esto se relaciona con la aparición de un mayor número de cánceres en el esófago, al crearse displasia o células precancerosas en algunas partes de la zona enferma.
Normalmente, una vez localizadas las zonas más enfermas (con displasia), se extirpan mediante una técnica endoscópica conocida como mucosectomía (REM). Incluso si la lesión es de mayor tamaño o gravedad puede extirparse completamente mediante una variante de tratamiento endoscópico más agresivo conocida como DSE (Disección Submucosa).
Toda la zona enferma se cura al completo, volviendo a aparecer mucosa del esófago completamente normal en más del 93% de los pacientes
El sistema HALO se utiliza para tratar el resto del esófago enfermo o para aquellos casos en los que no se detecta ningún foco concreto de células enfermas que se puedan extirpar. Para ello aplica de forma constante una energía calorífica a la mucosa, alcanzando la capa en la que residen las células madre del esófago sin dañarlas (se profundiza menos de 1 mm.), y así elimina el esófago de Barrett.
Este tratamiento se realiza por vía endoscópica, sin cirugía ni ingreso y permite evitar muchos de los efectos secundarios de otras técnicas de ablación como la aparición de estrecheces, al no afectar las capas más profundas.
Tal y como refleja el Dr. Sarbelio Rodríguez, Jefe de Servicio de Medicina del Aparato Digestivo del complejo hospitalario Ruber Juan Bravo, al quedar intactas las células madre de la mucosa del esófago toda la zona enferma se cura al completo, volviendo a aparecer mucosa del esófago completamente normal en más del 93% de los pacientes.
Se ha comprobado que más de dos años después de ser aplicado no han reaparecido ningún tipo de células precancerosas en la mucosa tratada
En el resto de los casos, y tras un segundo tratamiento con un catéter más sencillo, se ha comprobado que más de dos años después de ser aplicado no han reaparecido ningún tipo de células precancerosas en la mucosa tratada.
Esta técnica, además, ha demostrado ser muy eficaz para el tratamiento de otras enfermedades de la mucosa del aparato digestivo como la ectasia vascular gástrica o la proctitis por radiación, donde hay que destruir una capa para conseguir la reaparición de un nuevo epitelio sano. Igualmente está comenzando a ser un tratamiento eficaz para las estenosis de los conductos biliares de origen maligno, consiguiendo liberar al hígado de la obstrucción que estas enfermedades producen.
En conclusión, "la radiofrecuencia ofrece un tratamiento altamente eficaz y muy seguro del esófago de Barrett, que se realiza de forma ambulatoria, evitándose la progresión de esta enfermedad al cáncer de esófago una vez que existen células precancerosas (displasia)", afirma el Dr. Rodríguez.