Coincidiendo con el Día Mundial de la Seguridad del Paciente, que se celebrará el próximo 17 de septiembre, la presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP), Carina Escobar, reivindica que la participación de los pacientes “es clave” para conseguir la seguridad en su atención. “Desde las asociaciones de pacientes debemos seguir concienciado y apoyando la necesidad de participación activa de los pacientes y sus familias a todos los niveles de la atención de la salud con el objetivo de mejorar la seguridad del paciente”, afirma la presidenta.
La seguridad del paciente se trata de una herramienta transversal que va dirigida a todos los pacientes y profesionales en todos los niveles de la asistencia sanitaria y cuyo principal objetivo es mejorar la cultura de seguridad y favorecer la implantación de prácticas seguras de efectividad demostrada.
“Los pacientes aún tienen mucho desconocimiento acerca de lo que significa exactamente la ‘seguridad del paciente’"
Actualmente está aprobado el Plan de Acción Mundial en pro de la Seguridad del Paciente 2021-2030 que despliega de manera transversal actuaciones para prevenir y reducir eventos adversos en el entorno sanitario, como, por ejemplo, futuras pandemias. No obstante, “los pacientes aún tienen mucho desconocimiento acerca de lo que significa exactamente la ‘seguridad del paciente’, apunta Escobar. Y añade que “debemos apostar por promover la educación y la concienciación sobre la seguridad del paciente, además de adoptar medidas para la participación de los pacientes y sus familias”.
Otro de los aspectos a mejorar respecto a la seguridad del paciente tiene que ver con la necesidad de empoderar a los pacientes para que se corresponsabilicen sobre su salud y seguridad. Debe prestarse especial atención a las personas mayores y frágiles ya que, en muchas ocasiones, las barreras de comunicación con sus profesionales sanitarios limitan su auto cuidado. Por ello, también es importante fomentar la formación de profesionales sanitarios y no sanitarios en comunicación e información accesibles para mejorar la relación médico-paciente-cuidador y dar una respuesta adaptada a las necesidades del paciente, especialmente de los más vulnerables.
Además, afirmaron que es necesario involucrar a los responsables políticos, trabajadores de la salud, organizaciones de pacientes y a la sociedad en general para hacer partícipes a los pacientes y a sus familias de las políticas y las prácticas para lograr así una atención de la salud segura, como implementar las reformas necesarias para garantizar la atención centrada en el paciente.