Un paso “importante y necesario”. Así define el Grupo de Trabajo sobre Nutrición de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE) el Plan Estratégico Nacional para la Reducción de la Obesidad Infantil 2022-2030 presentado el pasado 10 de junio por el Gobierno. Una “valiosa declaración de intenciones” que la SEE espera ver pronto plasmada en medidas concretas, aunque lamenta que la estrategia no vaya acompañada de respaldo presupuestario.
La Sociedad Española de Epidemiología participó en la mesa científica del plan, en un equipo de diagnóstico e indicadores, junto con el Instituto de Salud Carlos III y la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, y en varios grupos de trabajo para proponer medidas por entornos: familiar, educativo, sanitario, ocio y deporte, urbano y rural, digital y audiovisual y macrosocial.
En este sentido, desde el Grupo de Trabajo de Nutrición de la Sociedad Española de Epidemiología, consideran que, entre las posibles medidas para combatir la obesidad infantil mediante la promoción de una alimentación saludable y actividad física, se debería priorizar la aprobación del Real Decreto sobre regulación de la publicidad de alimentos y bebidas no saludables, previa modificación del mismo para ampliar su alcance, atendiendo a las aportaciones realizadas en su día por la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS).
La SEE considera muy necesario aprobar un sistema de bonos o subsidios para que las familias vulnerables puedan comprar alimentos frescos y saludables, con especial atención a los hogares que sufren situación de pobreza severa, con inseguridad alimentaria moderada o grave
Por otra parte, la SEE considera muy necesario aprobar un sistema de bonos o subsidios para que las familias vulnerables puedan comprar alimentos frescos y saludables (frutas, verduras, aceite de oliva, frutos secos y pescado), con especial atención a los hogares que sufren situación de pobreza severa, con inseguridad alimentaria moderada o grave.
Además, es partidaria de implantar un impuesto específico a todas las bebidas azucaradas y de añadir advertencias sanitarias y un sistema frontal interpretativo en el etiquetado de alimentos y bebidas. En cuanto al ámbito escolar, apuesta por aumentar el tiempo de actividad física en el currículum escolar y usar las instalaciones deportivas escolares como espacios abiertos.
Asimismo, cree importante fomentar la creación de carriles bici y rutas seguras a pie en pueblos y ciudades para incentivar el transporte activo, al igual que limitar la circulación de vehículos privados para impulsar los medios de transporte público.
La SEE es partidaria de implantar un impuesto específico a todas las bebidas azucaradas y de añadir advertencias sanitarias y un sistema frontal interpretativo en el etiquetado de alimentos y bebidas
Por último, la SEE señala la necesidad de regular los estándares alimentarios y nutricionales para garantizar una oferta alimentaria saludable y sostenible en establecimientos públicos, especialmente sanitarios, deportivos y escolares, con becas de comedor para las familias vulnerables.
La Sociedad Española de Epidemiologia recuerda que estas siete medidas atienden a los principios de salud pública establecidos en la Ley General de Salud Pública y a criterios de magnitud, efectividad, coste, justicia, equidad, aceptación de la población diana, recursos personales necesarios para beneficiarse de la intervención, acción gubernamental de amplio alcance, consenso de expertos, experiencias positivas en otros países y amplísimo nivel de apoyo de la ciudadanía.