Un grupo de investigadores del Instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA, del Hospital Clínico de València, y del Instituto de Biomedicina de Sevilla (IBiS), utilizarán modelos de cultivo 3D para determinar la capacidad de invasión o proliferación del Sarcoma de Ewing. En este sentido, los modelos de cultivo 3D serán empleados para comprobar si la composición y las propiedades físicas de la matriz extracelular pueden afectar a la heterogeneidad intratumoral y provocar alteracionesen el genoma de este tumor.
Los sarcomas, que celebran su Día Internacional el 13 de julio, son tumores malignos que se originan en los tejidos conectivos del cuerpo, como son los músculos o los huesos. Sus síntomas pueden variar en función del tipo y la ubicación, pero incluyen dolor, hinchazón, una masa palpable o cambios en la movilidad.
En este contexto, el Sarcoma de Ewing es un tipo raro de cáncer producido generalmente en los huesos o en el tejido blando que se encuentra a su alrededor. Se trata del segundo tumor óseo maligno primario más frecuente en la infancia, por detrás del osteosarcoma. Además, de acuerdo con el Informe Estadístico del Registro Español de Tumores Infantiles (RETI-SEHOP), 1980-2021 (Ed. Diciembre-2022), es el más frecuente en España.
La tasa de supervivencia actual es inferior al 20% en los pacientes con enfermedad primaria diseminada o recaída
Es un tipo de tumor con especial incidencia en jóvenes y niños, pues el 80% de los casos afectan a menores de 20 años, con una incidencia anual aproximada de tres casos por millón en menores de 21 años. Sin embargo, es infrecuente en mayores de 30 años y en menores de cinco. Además, es más habitual en varones.
El tratamiento de este sarcoma ha avanzado de manera visible en los últimos años, gracias a la investigación sanitaria. Esto ha ayudado a mejorar las perspectivas de las personas que lo padecen. A pesar de ello, la tasa de supervivencia actual es inferior al 20% en los pacientes con enfermedad primaria diseminada o recaída.
“Por lo general, la matriz extracelular del sarcoma de Ewing está poco desarrollada, aunque es la relación con esa matriz y su complejidad biológica la que nos obliga a seguir buscando en ella terapias dirigidas e inmunes y/o marcadores predictores de respuesta terapéutica, especialmente para aquellos pacientes con metástasis, el principal factor pronóstico adverso”, explica la doctora Rosa Noguera, codirectora de la investigación y miembro del Grupo de Investigación Traslacional de Tumores Sólidos Pediátricos en INCLIVA-Universitat de València (UV).
La matriz extracelular es una red de moléculas que ayuda a que las células se unan y se comuniquen con las células cercanas, y que desempeña una función importante en la multiplicación celular, el movimiento celular y otras funciones celulares.
En un estudio anterior, llevado a cabo por los mismos investigadores, observaron que la vitronectina, una molécula que ancla las células tumorales a la matriz extracelular y facilita la migración de las mismas, era más abundante en un subtipo de sarcomas de Ewing, pudiendo tener un comportamiento más agresivo.
Por ello, en esta ocasión los investigadores emplearán modelos de cultivo 3D con o sin vitronectina añadida con los que se trabaja activamente en el laboratorio de la Dra. Noguera. Estas matrices artificiales crecerán distintos tipos de células malignas de sarcoma de Ewing, derivadas de tumores de pacientes. Así, los los investigadores caracterizarán su comportamiento en función de la presencia de vitronectina añadida.
Mediante técnicas de análisis de imagen digital y técnicas genómicas de última generación, definirán patrones de agresividad celular e interacción con las matrices artificiales y dianas terapéuticas
Mediante técnicas de análisis de imagen digital y técnicas genómicas de última generación, definirán patrones de agresividad celular e interacción con las matrices artificiales y dianas terapéuticas. Con los hallazgos resultados de estos procedimientos, se podrá proporcionar información diagnóstica y pronóstica muy relevante.
En caso de confirmarse los resultados y la vitronectina tiene un papel importante en la agresividad del sarcoma de Ewing, “será posible valorar la incorporación de este biomarcador a los analizados de rutina en el diagnóstico diferencial de los sarcomas” afirman las doctoras Noguera y Amparo López-Carrasco.
Además, “podrían iniciarse pruebas con nuevas terapias que impidan la unión de la vitronectina a las células tumorales en los modelos 3D y en ratones con sarcomas de Ewing que presenten una gran cantidad de esta molécula”, concluyen las investigadoras.