Sanitas ha sido condenada a pagar 3,3 millones de euros a una familia cuyo hijo padece graves secuelas tras la asistencia a la madre durante el parto hace 13 años.
Según un juzgado español, el menor sufrió falta de oxígeno durante el parto, lo que le causó daños irreparables en el cerebro, todo ello por un deficiente seguimiento del estado de la madre y el feto, ya que se retrasó hasta seis horas la realización de una cesárea de urgencia.
Después de casi 10 años de proceso judicial, la sentencia establece que “existió una inadecuada vigilancia en el tratamiento”, una falta de vigilancia que “desembocó en que la hipoxia causara lesiones neurológicas irreversibles al menor”, quien, a día de hoy, y tras numerosas intervenciones, no puede valerse por sí mismo.
Más de 1,9 millones de euros por los daños y otros conceptos; y 1,4 millones en concepto de intereses
Así pues, el fallo dictamina que Sanitas debe abonar 169.000 euros por incapacidad temporal; 443.000 euros, por las secuelas físicas; 573.000 euros por la invalidez absoluta y la necesidad de ayuda permanente; 79.000 euros por perjuicio estético en grado importantísimo; 143.000 euros por el daño moral a los progenitores; 124.000 euros por adecuación de vivienda y coche; y 300.000 euros por gastos médicos futuros.
Además, 1,4 millones de euros en concepto de los intereses correspondientes desde que la aseguradora recibió la primera demanda en diciembre de 2012. Una suma total que supone la mayor condena por negligencia sanitaria dictada por un juzgado español.