El Ministerio de Sanidad insiste hoy, día 1 de diciembre, con motivo del Día Mundial del Sida, en la importancia de la promoción de relaciones sexuales seguras a través del uso de estrategias preventivas combinadas, el uso del preservativo, la realización de la prueba de VIH y la profilaxis post y pre-exposición.
Cabe recordar que entre los objetivos del Ministerio en la respuesta frente al VIH para el año 2020, estaba el alcanzar los indicadores 90-90-90 y 90, así como la 0 discriminación y la reducción del 75% de las nuevas infecciones por el VIH con respecto a 2010. Y, el balance es positivo: se está cerca de alcanzar el 90% de diagnóstico del VIH entre las personas infectadas; el 97% de las personas diagnosticadas fueron tratadas con antirretrovirales y el 90% de las personas en tratamiento antirretroviral están con carga viral suprimida.
Un 68% de las personas con el VIH en tratamiento valoró su calidad de vida como buena o muy buena
Respecto al cuarto 90, sobre calidad de vida, en 2019 se midió por primera vez y un 68% de las personas con el VIH en tratamiento valoró su calidad de vida como buena o muy buena. Por otro lado, el Ministerio de Sanidad impulsó en 2018 el Pacto Social por la no discriminación y la igualdad de trato asociadas al VIH, en colaboración con las comunidades autónomas, entidades locales, ONG, sociedades científicas y otros sectores implicados.
En el marco de dicho Pacto se han adoptado medidas como la eliminación del diagnóstico de VIH como causa genérica de exclusión en las convocatorias de empleo público, según lo establecido en el acuerdo de Consejo de Ministros del 28 de noviembre de 2018.
Además, según lo aprobado en los Consejos Interterritoriales de Sanidad y de Servicios Sociales, se ha eliminado cualquier tipo de discriminación hacia las personas con infección por el VIH en el acceso a centros residenciales públicos o a plazas concertadas en centros de titularidad privada.
PROTECCIÓN FRENTE A LA COVID-19
Por otro lado, este año, marcado por la respuesta a la COVID-19, la Secretaría del Plan Nacional sobre el Sida ha trabajado con las comunidades autónomas, las ONG, los profesionales sanitarios y las sociedades científicas en la atención de las personas con infección por el VIH y las que se encuentran en situaciones de mayor vulnerabilidad.
Se han realizado diferentes documentos de recomendaciones para la prevención de la COVID-19 y se ha recopilado información relativa a la continuidad en la atención de las personas con infección por el VIH, el seguimiento de la PrEP y la dispensación del tratamiento antirretroviral para poder valorar las necesidades de mejora.
Sanidad insiste en que no se puede bajar la guardia y se deben de mantener las medidas de prevención de la infección por el VIH
Asimismo, se ha puesto en marcha un ensayo clínico sobre la prevención de la infección por coronavirus en sanitarios, EPICOS, en el que están participando 74 hospitales de 15 comunidades autónomas y 5 países de Latinoamérica (Argentina, Bolivia, México, Uruguay y Venezuela).
El Ministerio hace hincapié en que a pesar de la grave pandemia que estamos viviendo, no podemos bajar la guardia y hemos de mantener las medidas de prevención de la infección por el VIH y la atención de las personas afectadas. Así, subraya que la promoción de las relaciones sexuales más seguras impulsando estrategias preventivas combinadas; el uso de preservativo, la realización de la prueba de VIH, y la profilaxis post y pre-exposición, son los objetivos prioritarios para el Plan Nacional sobre el Sida.
RETOS FUTUROS
Entre los principales retos para el futuro, el Gobierno comparte el compromiso de la comunidad internacional de poner fin a la epidemia de SIDA como amenaza para la salud pública para 2030. Para ello, trabaja en conseguir los objetivos de ONUSIDA 95-95-95 (95% de las personas con VIH diagnosticadas, de las que el 95% estén en tratamiento y al menos el 95% con carga viral indetectable) y del cuarto 95 para que las personas tengan una buena calidad de vida y cero discriminación.
Estos retos se reflejarán en el próximo Plan Estratégico de Prevención y Control de la infección por el VIH y otras infecciones de transmisión sexual 2021-2030 en el que ya se está trabajando en colaboración con las CCAA, las entidades locales, las ONG, las sociedades científicas y otros sectores implicados.