La pandemia de la Covid-19 y la “nueva normalidad” ha supuesto un duro golpe a la salud mental de los niños y adolescentes. Aunque en la mayoría de los jóvenes se muestran esperanzadores con el futuro, como refleja el estudio ‘La situación de la Salud Mental en España’ de la Confederación Salud Mental España, se ha vivido un aumento de adolescentes con intentos autolíticos, ansiedad, depresión, trastornos de conducta e intentos parasuicidas.
Desde Pediatría han denunciado este incremento de problema de salud mental y el empeoramiento de la salud mental de los adolescentes. “Hemos visto incremento de todas estas patologías. Además, estamos viendo que éstas están presentes en personas cada vez más jóvenes", explica el Dr. Pedro Javier Rodríguez Hernández, miembro de la Sociedad de Psiquiatría Infantil de la Asociación Española de Pediatría (SPI-AEP) a Consalud.es.
"Estamos viendo casos de pacientes que hubiesen debutado con 20 o 30 años y lo están haciendo en edad pediátrica”
En general, se estima que el 70% de las enfermedades de salud mental aparecen en la época infanto-juvenil. Los problemas de salud mental tienen en la mayoría de los casos su inicio antes de los 25 años. Según un estudio publicado en ‘Nature’ en junio de 2021, trastornos como la ansiedad, las fobias, el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) suelen aparecer entre los 8 y 13 años; los trastornos de conducta alimentaria (TCA), trastornos obsesivos compulsivos (TOC) o trastornos por consumo de cannabis tienden a originarse entre los 17 y 22 años; la esquizofrenia, el trastorno de la personalidad o el consumo de alcohol a los 25-27 años; y el trastorno por estrés postraumático, la depresión, a ansiedad generalizada, los trastornos psicóticos agudos y transitorios y la bipolaridad suelen iniciarse entre los 27 y 30 años, llegando incluso a los 35 años.
Frente a estos datos, se están viviendo inicios más precoces de algunas patologías. “La pandemia ha precipitado el inicio de patologías que suelen ser más de naturaleza neurobiológica. Estamos viendo casos de pacientes que hubiesen debutado con 20 o 30 años y lo están haciendo en edad pediátrica”, explica el Dr. Rodríguez Hernández. Una situación que también se está viviendo con el aumento del consumo de sustancias nocivas (drogas, tabaco y alcohol) en edades cada vez más tempranas.
ESCASEZ DE RECURSOS
La pandemia disparó los problemas de salud mental en una población que no era tan común. Esto llevó a la creación de la especialidad de Psiquiatría de la Infancia y la Adolescenciaen 2021 y a la preparación y formación de los profesionales para abordar estas patologías de forma precoz. “Cuanto antes se detecte más podremos trabajar”, explica el experto. “Cuando la oleada de niños y adolescentes con dificultades de salud mental llegan a edad adulta sin que se haya intervenido en ellos de forma precoz se produce una sobrecarga y una tensión del sistema de salud mental de adultos bastante importante”.
Sin embargo, los esfuerzos y campañas de prevención y abordaje de estos tratamiento “no son insuficientes, son muy insuficientes”, indica el Dr. Rodríguez Hernández. “En Estrategias de Prevención de Suicidio se gasta mucho menos que en las campañas de prevención de accidentes de tráfico, no olvidemos que por la primera causa fallecen diez veces más de número de personas. Hay que adecuarlo a la nueva realidad. Es el momento de ponerse las pilas y dar recursos y capacidad al sistema para absorber la alta tasa de incidencia del trastorno mental”, concluye.