La salud cerebral es fundamental para que el cerebro pueda realizar sus funciones adecuadamente y es una forma de prevenir la demencia. Por ello, la Confederación Española de Alzheimer y otras Demencias (CEAFA), ha lanzado una campaña para cuidar la salud cerebral. Así, busca concienciar sobre la importancia de cuidar el cerebro a lo largo de la vida.
Llevar unos hábitos de vida saludables permite minimizar el riesgo de desarrollar enfermedades cognitivas como la enfermedad de Alzheimer. En este sentido, tener una buena salud cerebral implica la capacidad del cerebro para realizar sus funciones adecuadamente, incluyendo la facultad de procesar información, regular las emociones, coordinar los movimientos, mantener la memoria y el aprendizaje, y controlar las funciones vitales del cuerpo, entre otros aspectos.
CEAFA: "La mala salud cerebral no solo afecta al individuo, sino que también impacta en las relaciones interpersonales, y en la calidad de vida en general”
En aquellos casos en los que no hay buena salud cerebral, pueden aparecer distintos problemas y trastornos, que afectan al funcionamiento del cerebro. Algunos de ellos son los problemas cognitivos, que se caracterizan por la dificultad para concentrarse, olvidos frecuentes, falta de claridad mental, lentitud para procesar información y problemas de lenguaje.
Por otro lado, también puede dar lugar a problemas emocionales como la ansiedad, depresión, cambios de humor, irritabilidad, y dificultad para regular las emociones. A su vez, cuando la persona no cuenta con una buena salud cerebral, puede aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades cerebrales como la demencia, esclerosis múltiple y otros trastornos cerebrales.
El incremento del riesgo de tener un accidente cerebrovascular, que puede causar daño cerebral permanente y afectar gravemente las habilidades cognitivas y emocionales, y las complicaciones del sueño, que pueden tener un impacto negativo en la salud general y el bienestar, son otras de las situaciones que una mala salud cerebral puede acarrear.
Según apuntan desde CEAFA, es importante destacar que la mala salud cerebral no solo afecta al individuo, “sino que también impacta en las relaciones interpersonales, y en la calidad de vida en general”. Por ello, la Confederación ha elaborado una serie de consejos a tener en cuenta para cuidar de la salud del cerebro.
CEAFA: "La salud cerebral es un proceso dinámico que puede mejorar o empeorar con el tiempo, por lo que requiere cuidarla a lo largo de toda la vida”
Así, llevar una alimentación saludable y equilibrada para proporcionar los nutrientes al cerebro, realizar ejercicio físico para mejorar la circulación sanguínea y el flujo de oxígeno al cerebro o realizar actividad mental para mantener en forma el cerebro y prevenir el deterioro cognitivo son algunas de las recomendaciones a tener en cuenta.
Además, dormir lo suficiente es esencial, y su falta puede afectar a la memoria, la concentración y el estado de ánimo. Practicar la meditación y la relajación ayudan a manejar el estrés crónico, y mantener las relaciones socialespermite evitar el aislamiento y la posibilidad de padecer depresión y ansiedad. Evitar el consumo de alcohol y tabaco es también fundamental.
La salud cerebral no es un estado estático, sino que es un proceso dinámico que puede mejorar o empeorar con el tiempo, “por lo que requiere cuidarla a lo largo de toda la vida”, subrayan desde CEAFA.