Radiografía del fentanilo: la droga más potente causa estragos de Estados Unidos a Europa

Estados Unidos registra más de 70.000 muertes al año por fentanilo, una droga que traspasa fronteras y causa también estragos en Canadá y Latinoamérica

Estados Unidos registra más de 70.000 muertes al año por fentanilo (Foto. Freepik)
Estados Unidos registra más de 70.000 muertes al año por fentanilo (Foto. Freepik)
Carmen Bonilla
29 agosto 2024 | 07:00 h
Archivado en:

El fentanilo es un opioide sintético altamente potente, que ha emergido como una de las sustancias más peligrosas del panorama global de drogas. En origen, era un fármaco para tratar el dolor intenso, pero es 50 veces más potente que la heroína y 100 veces más potente que la morfina. El problema del fármaco radica en que su eficacia y bajo costo han llevado a su uso ilícito, resultando en una gran crisis de salud pública, especialmente en Estados Unidos. El país norteamericano registra más de 70.000 muertes por sobredosis al año. En 2021, las sobredosis relacionadas con opioides, principalmente fentanilo, superaron las 100,000 muertes, una cifra sin precedentes que ha llevado a las autoridades a calificar la situación como una emergencia de salud pública.

El fentanilo ha comenzado a infiltrar mercados de drogas en Europa, Asia y América Latina, exacerbando las crisis locales de drogas y presentando nuevos desafíos para los sistemas de salud pública. Por ejemplo, en Asia, esta droga se está convirtiendo en uno de los principales productos de venta en el mercado negro. En concreto, el gobierno de Estados Unidos acusó durante mucho tiempo a China de llenar el país con drogas como el fentanilo, y aseguran que los opioides fabricados en el país asiático alimentan la peor crisis de drogas en la historia de Estados Unidos. Aunque el gobierno chino ha negado sistemáticamente tener conocimiento del tráfico ilegal de drogas, muchos estudios acusan a empresas de propiedad estatal de involucrarse en el tráfico de sustancias.

El continente americano es el que más está pagando las consecuencias de la mala regulación del fármaco en sus inicios, pues la droga también está causando estragos en Canadá. De acuerdo con el gobierno canadiense, más de 38.500 personas murieron en el país entre 2016 y 2022 por "aparente" consumo de opioides. Durante los tres primeros meses de 2018 se registraron en torno a 11 muertes al día por consumo de opioides, mientras que en 2021 y 2022 la tasa se elevó hasta alcanzar los 21 fallecimientos diarios promedio. Según el Canadian Centre on Substance Use and Addiction, el fentanilo estuvo involucrado en el 85% de las muertes por sobredosis de opioides registradas en el mismo periodo de 2022. Por su parte, los datos preliminares de 2023 apuntan a que el fentanilo estuvo involucrado en el 81% de la muertes por abuso de opioides que se produjeron de enero a marzo.

Según el Canadian Centre on Substance Use and Addiction, el fentanilo estuvo involucrado en el 85% de las muertes por sobredosis de opioides registradas en el mismo periodo de 2022 en Canadá

Bajando más al sur, el incremento de las incautaciones de fentanilo en Latinoamérica es alarmante. Además, no ayuda la presencia de otras drogas sintéticas como el 'tusi', el éxtasis y la ketamina, que podrían facilitar la expansión del fentanilo en un mercado ya receptivo.

Con todo, el incremento de las incautaciones de fentanilo en la zona es alarmante. InSight Crime, una organización sin fines de lucro, informó sobre un aumento significativo en la región, afectando a países como Costa Rica, Argentina, Colombia, Panamá, Ecuador, Brasil y Venezuela. El caso más representativo de la situación tuvo lugar hace poco en Argentina: murieron 24 personas en 24 horas por consumir una mezcla de fentanilo muy fuerte pensando que era solo cocaína.

Oceanía tampoco parece librarse de la amenaza del fentanilo. Según un informe publicado por la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes, tanto esta droga sintética como otros opioides se están expandiendo en dicho continente. De hecho, Australia ha llegado a incautar hasta 5 millones de dosis de fentanilo, en el que era el mayor cargamento que las autoridades del país habían visto hasta la fecha. A raíz de este panorama, no es de extrañar que este poderoso opioide haya cruzado fronteras europeas.

En Europa, preocupan los cambios que pueda sufrir el mercado de drogas tras la prohibición del cultivo de amapola implementada por el régimen talibán en Afganistán. Esto se debe a que dicha planta es utilizada para producir la heroína que se distribuye desde hace años en Europa y, el hecho de que se elimine la materia prima empleada por el mayor productor de opio del mundo, podría provocar que los narcotraficantes opten por comenzar a producir y vender opioides y otras drogas de origen sintético, como el fentanilo.

En Europa, preocupan los cambios que pueda sufrir el mercado de drogas tras la prohibición del cultivo de amapola implementada por el régimen talibán en Afganistán

Según el European Drug Report, las fuerzas de seguridad realizaron 187 incautaciones de derivados del fentanilo en doce países en 2021. En concreto, fueron confiscados unos cinco kilos y medio y casi 5.500 tabletas de estos estupefacientes en el continente europeo. Además, el fentanilo y sus derivados estuvieron relacionados con al menos 137 muertes ese mismo año y la mayoría de ellas tuvieron lugar en Alemania. En el informe también se destaca que las cifras pueden ser mayores y que muchas de las muertes podrían estar relacionadas con un uso indebido del fentanilo prescrito por los profesionales de la salud y no por consumo ilícito de fentanilo

¿DEBE PREOCUPARSE ESPAÑA?

Un reciente informe financiado por el Ministerio de Sanidad subraya que no hay datos que indiquen que en España pueda haber una crisis de salud pública relacionada con este analgésico. España mantiene unos controles estrictos en lo relativo a la dispensación de fármacos opioides, y los desvíos hacia los mercados ilegales, de momento, son anecdóticos. En concreto, la persistencia de la oferta de heroína procedente de Afganistán, el retroceso de los fentanilos y la irrupción de otras alternativas, la casi nula demanda de opioides sintéticos en nuestro país y el factor de protección que supone la robusta red española de atención a las adicciones están detrás de que esta droga no haya seguido los pasos de Estados Unidos.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
Lo más leído