La osteoartritis o artrosis de rodilla es el desgaste y la degeneración del cartílago en la articulación de la rodilla. Esta patología, que causa dolor, inflamación y es la principal causa de disminución de los movimientos en las articulaciones, es una de las más frecuentes en traumatología y también uno de los principales trastornos que afecta a la calidad de vida de las personas longevas. Su tratamiento ha mejorado significativamente en los últimos años gracias a los avances en las cirugías de reemplazo de la rodilla, los nuevos protocolos en el proceso de recuperación o el uso de terapias biológicas para intentar mejorar y retrasar el proceso degenerativo. Actualmente hay muchos estudios sobre las nuevas terapias biológicas, células madre, factores de crecimiento e implantación de condrocitos autólogos (procedimiento de implante de cartílago), pero los resultados no permiten asegurar que en un futuro cercano sustituirán a la cirugía de reemplazo articular.
Cuando esos tratamientos ya no son resolutivos y el paciente pierde calidad de vida por su dolor e incapacidad funcional, la única solución eficaz es la sustitución de la articulación dañada por una prótesis
"Para intentar retrasar la colocación de la prótesis en los procesos de osteoartritis, disminuir el dolor, la inflamación y la sintomatología durante un periodo de tiempo, nos apoyamos en tratamientos no quirúrgicos como pueden ser las infiltraciones de factores plaquetarios, de esteroides o de ácido hialurónico, pero cuando esos tratamientos ya no son resolutivos y el paciente pierde calidad de vida por su dolor e incapacidad funcional, la única solución eficaz es la sustitución de la articulación dañada por una prótesis", asegura la doctora Inmaculada Gómez Arrayás, traumatóloga especialista en cirugía de reemplazo articular, rodilla y cadera del Hospital Ruber Internacional.
La cirujana, una de las más experimentadas en prótesis de rodilla en España con sistema de navegación y pionera en esta técnica con más de 3.000 casos operados, aplica los nuevos protocolos de recuperación (Rapid Recovery) desde hace años con excelentes resultados. La cirugía de reconstrucción articular, o artroplastia, es una de las técnicas ortopédicas con más éxito en el mundo. Además, obtiene mejores resultados y aumenta la supervivencia del implante (20 años aproximadamente). Para la doctora Gómez Arrayás, "la correcta colocación y orientación de los implantes es muy importante para retrasar el desgaste del mismo y asegurar su larga duración. También lo es un buen balance de los ligamentos y partes blandas de la rodilla, para que, durante el recorrido en flexión y extensión, el eje se mantenga y las presiones que se ejerce en la superficie del implante estén correctamente repartidas. Todo ello evita un desgaste precoz y ayuda a una mejor dinámica de la nueva rodilla, consiguiendo más movilidad de forma precoz, con mucho menos dolor".
OPTIMIZAR RESULTADOS
"Con nuestro sistema de navegación quirúrgico, operamos las prótesis de rodilla con ayuda de un ordenador que, mediante sensores infrarrojos colocados en el fémur y en la tibia del paciente durante la cirugía, realiza una evaluación dinámica (en extensión y flexión) de la deformidad de la pierna y su cinemática. Tenemos información de la orientación de cada corte óseo que realizamos durante la cirugía y la ventaja de poder hacer correcciones intraoperatorias. Gracias a ello, también realizamos solo la liberación de partes blandas y ligamentos que necesitamos. Todo ello permite colocar una prótesis más estable en todo el recorrido de extensión a flexión. Con esta técnica además, disminuye el sangrado posoperatorio y no requiere dejar drenajes ni transfusión", explica la traumatóloga.
La inestabilidad junto con la infección son las causas más frecuentes de recambio precoz de prótesis de rodilla
Es muy importante la estabilidad en una prótesis de rodilla. La inestabilidad junto con la infección son las causas más frecuentes de recambio precoz de prótesis de rodilla. Por otro lado, gracias a la aplicación de programas para pacientes sometidos a cirugía de sustitución articular de rodilla como el protocolo Rapid Recovery, se consigue optimizar la analgesia pre, intra y posoperatoria, de modo que el paciente operado de prótesis comienza con una movilización temprana, a las pocas horas de la intervención y con un dolor posoperatorio mínimo. Además, a las 24-48 horas de la intervención, el paciente puede irse con el alta hospitalaria, caminando con ayuda de dos bastones y habiendo iniciado ya el proceso rehabilitador. Al movilizar pronto evitamos adherencias y eso beneficia mucho la fisioterapia posterior.