Un nuevo estudio de la Northwestern Medicine y la Universidad de Surrey, en Reino Unido, ha comprobado que las personas con diabetes que tenían problemas frecuentes para dormir tenían un 87% más de probabilidades de morir en los siguientes nueve años, según publican en el Journal of Sleep Research.
Los participantes en el estudio con diabetes que sufrían alteraciones frecuentes del sueño tenían un 87% más de probabilidades de morir por cualquier causa (accidente de tráfico, infarto, etc.) durante los 8,9 años de seguimiento del estudio, en comparación con las personas sin diabetes ni alteraciones del sueño. Tenían un 12% más de probabilidades de morir durante este periodo que los que tenían diabetes pero no alteraciones frecuentes del sueño.
"Si no se tiene diabetes, las alteraciones del sueño siguen estando asociadas a un mayor riesgo de morir, pero es mayor en el caso de los diabéticos", señaló la autora correspondiente del estudio, Kristen Knutson, profesora asociada de neurología y medicina preventiva de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern.
"Aunque ya sabíamos que existe una fuerte relación entre el sueño deficiente y la mala salud, esto ilustra el problema de forma descarnada"
Pero respondiendo a una sencilla pregunta de si le cuesta dormirse por la noche o se despierta en mitad de la noche, los pacientes pueden empezar a abordar los trastornos del sueño a una edad más temprana y, con suerte, mitigar este mayor riesgo de muerte, explica Knutson.
"Esta simple pregunta es bastante fácil de hacer para un clínico. Incluso puede preguntársela a sí mismo", señala Knutson. "Pero es una pregunta muy amplia y hay muchas razones por las que uno puede no dormir bien. Por eso es importante que se lo plantees a tu médico para que pueda profundizar".
"¿Es sólo el ruido o la luz o algo más importante, como el insomnio o la apnea del sueño? Esos son los pacientes más vulnerables que necesitan apoyo, terapia e investigación de su enfermedad", añade.
Es el primer estudio que examina el efecto de la combinación de insomnio y diabetes sobre el riesgo de mortalidad
"Aunque ya sabíamos que existe una fuerte relación entre el sueño deficiente y la mala salud, esto ilustra el problema de forma descarnada - apunta el primer autor del estudio, Malcolm von Schantz, profesor de cronobiología de la Universidad de Surrey -. La pregunta formulada cuando los participantes se inscribieron no distingue necesariamente entre el insomnio y otros trastornos del sueño, como la apnea del sueño. Aun así, desde un punto de vista práctico no importa. Los médicos deberían tomarse los problemas de sueño tan en serio como otros factores de riesgo y trabajar con sus pacientes para reducir y mitigar su riesgo general".
Los autores analizaron los datos existentes de casi medio millón de participantes de mediana edad en el Estudio del Biobanco del Reino Unido. Hasta donde saben los científicos, es el primer estudio que examina el efecto de la combinación de insomnio y diabetes sobre el riesgo de mortalidad.
"Queríamos ver si si tienes tanto diabetes como alteraciones del sueño, ¿estás peor que sólo con la diabetes?, explica Knutson. Podría haber sido de cualquier manera, pero resulta que tener tanto diabetes como alteraciones del sueño se asoció a una mayor mortalidad, incluso en comparación con los que tenían diabetes sin alteraciones del sueño".