Un grupo de científicos chinos junto al médico español Miguel Ángel Esteban del Instituto de Biomedicina y Salud de Guangzhou han anunciado el nacimiento en un laboratorio de Shangái del primer mono quimérico creado con células madre de otro embrión que podría ayudar a la investigación científica de enfermedades y a la conservación de especies en peligro de extinción, según ha publicado la revista científica 'Cell'.
Se trata de la primera vez que se consigue una especia quimérica, es decir, de organismo híbrido, de primates no humanos ya que, hasta ahora, sólo se habia conseguido con éxito en los ratones y ratas desarrollados mediante la complementación embrionaria temprana con células madre embrionarias homólogas, que se han utilizado para la generación de modelos de orientación genética.
Para lograr el nacimiento de este mono quimérico, los científicos han probado sistemáticamente varias condiciones de cultivo para establecer células madre embrionarias de mono y han optimizado los procedimientos para el cultivo de embriones quiméricos. Este enfoque generó un feto de mono abortado y un mono quimérico vivo con una alta contribución de células madre donadas.
Un proceso de caracterización demostró que las células del donante se incorporaron de manera eficiente (hasta un 90%) en varios tejidos (incluidas las gónadas y la placenta) de los monos quiméricos. Estos hallazgos tienen implicaciones importantes para el estudio de la pluripotencia ingenua de los primates y la ingeniería genética de primates no humanos.
Los resultados allanan el camino para la futura generación de primates no humanos genéticamente modificados con reprogramación de células somáticas en células madre pluripotentes editadas genéticamente
En el estudio, los investigadores probaron sistemáticamente el efecto de varios medios humanos de reprogramación de células somáticas en células madre pluripotentes en las células madre embrionarias de monos 'cynomolgus' y optimizaron los protocolos de inyección en embriones tempranos de mono y el cultivo 'in vitro' de los embriones inyectados.
Utilizando estos enfoques, los científicos demostraron un alto grado de quimerismo de las células madre embrionarias de mono tanto en cultivos prolongados de embriones 'in vitro' como durante la gestación 'in vivo', produciendo una descendencia viva que mostró entre el 20 y el 90 por ciento de las células madre embrionarias de donantes en tejidos quiméricos, incluidas las gónadas y la placenta.
"Nuestro resultado representa una demostración de prueba de principio de que se pueden generar quimeras con altas contribuciones de células madre embrionarias en primates no humanos a través de la complementación temprana de embriones con células madre pluripotentes homólogas vírgenes, allanando el camino para la futura generación de primates no humanos genéticamente modificados con reprogramación de células somáticas en células madre pluripotentes editadas genéticamente", explican los autores en el estudio.