Investigadores del Instituto de Virología Humana (IHV) de la Universidad de Maryland (UMSOM), han descubierto nuevos hallazgos en referencia al papel fundamental que juega la microbiota del tracto uterino y genital en los resultados adversos del embarazo. Además, también sería determinante en la inestabilidad genómica que se origina en el útero durante el desarrollo fetal.
El estudio, publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of America (PNAS), relacionó la inestabilidad genómica con la proteína de Mycoplasma fermentans, un tipo de bacteria que suele encontrarse en el tracto urogenital. Esta proteína redujo la fertilidad en hembras de ratón y provocó más defectos de nacimiento en sus crías recién nacidas.
Los ratones presentaban una deleción en el gen Grid2, que en humanos conduce a la enfermedad genética rara conocida como ataxia espinocerebelosa
La microbiota humana afecta al metabolismo, la susceptibilidad a las enfermedades infecciosas o a la regulación del sistema inmunitario, entre otras cosas. En este sentido, uno de estos componentes bacterianos, conocido como micoplasma, ha sido relacionado con varios tipos de cáncer.
Ahora, el equipo de investigación ha estudiado una proteína de Mycoplasma, conocida como DnaK. Se trata de una proteína ventajosa para las bacterias por su función protectora, pero sus efectos sobre las células animales no son favorables. En estudios previos, los investigadores habían demostrado que DnaK es absorbida por las células del cuerpo e interfiere con proteínas clave implicadas en la preservación de la integridad del ADN y en la prevención del cáncer, como la proteína supresora de tumores p53.
Para llevar a cabo el actual estudio, se emplearon ratones que producen la proteína DnaK. Estos ratones acumularon inestabilidad genómica, en la que se duplicaron o eliminaron secciones enteras del genoma.
Algunos de estos ratones, de tres a cinco semanas de edad, mostraban problemas de movimiento y coordinación. Los ratones presentaban una deleción en el gen Grid2, que en humanos conduce a la enfermedad genética rara conocida como ataxia espinocerebelosa. Esta enfermedad causa retraso en el desarrollo de movimientos hábiles y discapacidades intelectuales.
Francesca Benedetti: "Los resultados arrojan luz sobre la contribución no identificada previamente de la microbiota humana a las anomalías genéticas"
"Los resultados no solo amplían nuestra comprensión de la interacción entre la microbiota del tracto urogenital y la salud reproductiva humana, sino que también arrojan luz sobre la contribución no identificada previamente de la microbiota humana a las anomalías genéticas", explica Francesca Benedetti, autora principal del estudio e Investigadora Asociada de Bioquímicay Biología Molecular en el IHV de la UMSOM.
La inestabilidad genómica podría explicar la disminución de la fertilidad y el aumento de casos de fetos con desarrollo anormal observados tras la exposición a DnaK. Esto abre la puerta a nuevas investigaciones, que descubran si la neutralización de la bacteria o de esta proteína podría preservar la fertilidad y prevenir ciertos defectos de nacimiento.