Llevar una dieta saludable durante el periodo de lactancia logra normalizar el contenido lipídico en la leche y prevenir alteraciones metabólicas en la descendencia. Así lo demuestra el estudio realizado por un equipo del área de Obesidad y Nutrición del CIBER (CIBEROBN), en el Laboratorio de Biología Molecular, Nutrición y Biotecnología (grupo de Nutrigenómica, Biomarcadores y Evaluación de Riesgos, NuBE) de la Universidad de las Islas Baleares (UIB) y del Instituto de Investigación Sanitaria de las Islas Baleares (IdISBa), en colaboración con el Instituto de Fisiología de la Academia Checa de Ciencias.
La investigación analizó, en un modelo animal, si al normalizar la dieta materna durante la lactancia se conseguía prevenir los efectos nocivos que el consumo de una dieta obesogénica que ejercen sobre el ‘lipidoma’ o perfil lipidómico (el conjunto de los centenares de lípidos) en la leche materna y el plasma de la descendencia.
En estudios anteriores, ya se demostraron las consecuencias negativas de la dieta obesogénica durante el periodo perinatal, más concretamente afectando a la función de la glándula mamaria. Partiendo de esta idea, los investigadores se centraron en las posibles estrategias de intervención durante el periodo de lactancia, con el objetivo de prevenir los efectos adversos causados por este tipo de dietas desequilibradas.
Los resultados muestran diferentes beneficios, tanto en el correcto crecimiento y la salud posterior del niño, como en la prevención de trastornos metabólicos
Para ello, realizaron un análisis del perfil lipidómico que determinase las alteraciones involucradas en el riesgo de enfermedades en etapas posteriores. Además del propio análisis del perfil lipídico del plasma de las crías en la etapa final de la lactancia.
Tales alteraciones en la leche materna y en el plasma de sus crías, fueron ampliamente revertidas con una dieta equilibrada durante la lactancia. La mejora se ha relacionado con la recuperación de los niveles de expresión de la hormona adiponectina en la glándula mamaria, así como con la disminución en la expresión de varios factores proinflamatorios.
Los autores del estudio dirigido por la Prof. CatalinaPicó, se encuentran, en este momento, en el proceso de estudio sobre la medida en que estos resultados (obtenidos en un modelo animal) pueden extrapolarse a humanos. En cualquier caso, recomiendan extremar el cuidado de la alimentación durante la lactancia.