La cirugía de Mohs se considera la técnica más eficaz y segura para tratar el cáncer de piel de tipo no melanoma y algunos subtipos de melanoma. Los dos tipos más comunes de cáncer de piel son el carcinoma de células basales (CBC) y carcinomas de células escamosas (CEC).
La cirugía de Mohs o cirugía micrográfica de Mohs, es un procedimiento que consiste en controlar microscópicamente los bordes y el fondo del tumor por etapas durante la operación quirúrgica,analizándolas minuciosamente y asegurando así la extirpación del tumor con todos los márgenes libres, preservando al máximo el tejido sano y dejando la menor cicatriz posible. A diferencia de la cirugía convencional donde se analiza un 3% de la muestra extirpada, en la cirugía de Mohs, el procesamiento de la muestra permite la visualización del 100% de los bordes del tumor al microscopio.
“El cirujano que elimina el tejido canceroso y reconstruye mediante cirugía reparadora facial la herida y el patólogo, que diagnostica las biopsias al microscopio en un laboratorio especial cercano al quirófano”, explica el doctor Ricardo Ruíz, responsable de la Unidad de Dermatología Médico-Quirúrgica, Estética y Capilar del Hospital Ruber Internacional y de la Clínica Dermatológica Internacional, donde se ha realizado con éxito este procedimiento.
“Una ventaja es la alta tasa de curación, hasta el 99% para un cáncer de piel que no ha sido tratado previamente”, asevera el doctor Francisco Javier Vicente
El patólogo dirige la cirugía, es decir, indica las zonas que se deben seguir extirpando, ya que localiza las zonas con tumor residual. "Después de una serie de fases, el patólogo finalmente nos indica que todo el tumor está extirpado y entonces cerramos la herida con técnicas innovadoras para dejar la menor cicatriz posible”, subraya.
La cirugía precisa de anestesia local. “Otra ventaja es la alta tasa de curación, hasta el 99% para un cáncer de piel que no ha sido tratado previamente”, asevera el doctor Francisco Javier Vicente, experto en cirugía de Mohs y jefe de la Unidad Integral de Cáncer de Piel del Ruber Internacional.
De acuerdo a otro especialista del equipo, el doctor Pedro Rodríguez, dermatólogo experto en oncología y cirugía dermatológica, la cirugía de Mohs ofrece una serie de ventajas fundamentales, “proporciona los mejores resultados oncológicos y obtiene los mejores efectos estéticos, ya que respeta la piel sana consiguiendo que la cicatriz sea más pequeña”.
Sin embargo, este procedimiento no está indicado para todos los tumores malignos de piel. "Lo reservamos para epiteliomas agresivos, que es el tumor maligno más frecuente de la piel y que aparecen en zonas delicadas de la cara”, afirma el doctor Ricardo Ruíz.
También esta recomendado para el tratamiento de muchos carcinomas de células basales y carcinomas de células escamosas, incluyendo aquellos en áreas cosméticas y funcionales importantes alrededor de los ojos, nariz, labios, orejas, cuero cabelludo, dedos de las manos, dedos de los pies o genitales. Y tumores grandes con compartamiento agresivos, o aquellos con bordes mal definidos. “De la misma manera, algunos tipos de melanoma en localización facial son tratados con éxito con la cirugía de Mohs en diferido, en la cual el procesamiento de la muestra se realiza en 24 horas en lugar de unos minutos y la cirugía se realiza en varios días, con la mayor tasa de curación posible”, concluye el doctor Ricardo Ruíz.