El Hospital Ruber Internacional ha celebrado recientemente la ‘I Reunión Multidisciplinar de Uro-Oncología. Avances en Oncología’, que ha reunido a expertos de las especialidades de Urología, Oncología y Radioterapia para tratar, desde un enfoque multidisciplinar, los últimos avances en el cáncer de próstata, vejiga y riñón. También se ha analizado el papel de la robótica en la la prostatectomía radical.
El presidente de la Sociedad Europea de Oncología Médica (SEOM), Josep Tabernero, ha hecho referencia a la revolución que ha supuesto la inmunoterapia en el tratamiento del cáncer: “Hoy en día hacemos mejores estudios clínicos y todavía nos queda por ver los avances en inmunoterapia para aquellos tumores que no han reconocido al sistema inmune.”
El carcinoma de próstata es el tumor con mayor incidencia en los hombres en España
El carcinoma de próstata es el tumor con mayor incidencia entre los hombres españoles. Una de las claves de su diagnóstico es verificar los niveles de una proteína llamada antígeno prostático específico (PSA). Sin embargo, según señala el urólogo Alberto Pérez-Lanzac, se trata de un marcador “poco específico para la identificación y estratificación del cáncer”. Frente a este problema, el doctor destaca la importancia de conseguir una mejora en relación con los biomarcadores.
Fernando Herráiz, del Departamento de Diagnóstico por Imagen, habló del papel crucial de la resonancia magnética multiparamétrica de próstata para detectar este tipo de cáncer y su utilidad para la realización de biopsias de alta calidad, las de fusión, con la toma de muestras selectivas de las zonas sospechosas.
La cirugía es el mejor tratamiento para los tumores primarios, mientras que en casos de metástasis es más efectiva la radioterapia
El cáncer de próstata, al igual que el resto de tumores, puede diseminarse. Afortunadamente, existen diferentes pruebas diagnósticas para la detección de posibles metástasis, como la gammagrafía ósea. En cuanto a los tratamientos, la cirugía sigue siendo una de las mejores opciones a día de hoy. Una de las técnicas más frecuentes es la prostatectomía radical, es decir, la extirpación total de la próstata y parte del tejido circundante. Actualmente, esta intervención se realiza por vía laparoscópica, con la asistencia del Robot Da Vinci, convirtiéndose así en la técnicas que ofrece mejores resultados y menos secuelas.
Sin embargo, el cáncer de próstata puede reaparecer tras la cirugía radical, de forma que entre el 10% y el 40% de los pacientes sufren una recaída. Según la oncóloga Aurora Rodríguez, “prácticamente dos tercios de estos pacientes, si no se someten a tratamiento, desarrollaran metástasis en los siguientes 8 años y la supervivencia en este escenario será menor de 5 años”. Ante estas situaciones, y dependiendo de cada caso, las mejores opciones son la radioterapia de rescate o la radioterapia adyuvante, mientras que para el tratamiento del tumor primario suele ser más efectiva la cirugía.