Narcolepsia unida a cataplejía, la enfermedad asociada a la felicidad que se trata con antidepresivos

José M. Lozano Motos | Madrid

La narcolepsia unida a ataques de cataplejía es una enfermedad asociada a la felicidad y a los momentos agradables que se trata con antidepresivos, según ha asegurado a ConSalud.es la vocal del Grupo de Estudio de Trastornos de Vigilia y Sueño de la Sociedad Española de Neurología (SEN), la doctora Montserrat Pujol.

A su juicio, y con motivo de la celebración este martes, 18 de marzo, del Día Europeo de la Narcolepsia, ésta es una enfermedad que "puede aparecer más o menos bruscamente", aunque tarda hasta diez años en diagnosticarse. En ella, el paciente "empieza, normalmente, con somnolencia durante el día y, posteriormente, suele añadirse otro síntoma, que es el de la cataplejía", declara.

A pesar de que los ataques de ésta "no siempre van asociados" a la patología, la experta incida en ella al asegurar que "es una sensación de debilidad que puede ser generalizada o localizada". Ésta, que se asocia a las emociones, aparece "cuando el paciente está riéndose o cuando ha tenido una emoción positiva", cuando se encuentra "tan a gusto".

Así lo expone Pujol, que reconoce que la cataplejía puede hacer que el paciente "llegue a caerse al suelo" pero, en ningún caso, puede derivar en que pierda el conocimiento. Lo que sí reafirma es que éste puede dormirse en cualquier momento, "ya sea en la consulta del dentista, delante del jefe o en la escuela".

Precisamente, destaca éste último aspecto, y es que, en general, la narcolepsia "tiene dos picos de aparición", siendo el más común de ellos "cuando la persona tiene entre 15 y 20 años". Por su parte, el menos frecuente es cuando alcanza los 40 años, aunque para ambos, hacer pequeñas siestas hace "que se encuentren mejor", afirma.

SE PRODUCE POR UN FALLO DE LA HIPOCRETINA

En cuanto al tratamiento farmacológico, Pujol manifiesta que éste es "sintomático" para esta patología producida por el fallo de un neurotransmisor, "una sustancia química que se genera en el cerebro y que se llama hipocretina". "No tenemos esta sustancia disponible para poder administrársela a los pacientes", lamenta.

Así, si el paciente manifiesta mucha somnolencia, se le ofrece tratamiento para que esté más activo; mientras que si lo que presenta son ataques de cataplejía, se le ofrecen los citados antidepresivos o serotonínicos. La explicación a esta, en principio, contradicción la halla en que éstos "alteran la fase REM".

En estos pacientes, uno de los problemas que existen "está en el control de esta fase del sueño", continúa al respecto la experta, que añade que estos medicamentos "van muy bien para este tipo de síntoma". De cualquier forma, Pujol subraya para concluir que estos pacientes, "en realidad, no duermen más que el resto de las personas".


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