La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece la supervivencia en el periodo del posparto como los primeros 42 días posteriores al nacimiento, la interrupción del embarazo o el aborto espontáneo. Los datos relativos a los países de altos ingresos muestran que la mortalidad materna es baja, y la mayoría de decesos se producen después del parto. La OMS informa de que prácticamente el 99% de las muertes maternas se produce en países en vías de desarrollo, siendo el África subsahariana la región que acumula casi la mitad de estos fallecimientos.
Esta región de África representó en 2013 dos tercios de las muertes maternas totales de todo el mundo. El 48% de estas se produjeron entre las primeras 24 horas y los 42 días posteriores al parto, mientras que el 13% se registraron entre los 43 días posteriores al parto y el año. Ante esta fotografía una reciente investigación publicada por The Lancet Global Health sugiere la importancia de ampliar el periodo de supervivencia del posparto fijado por la OMS en 42 días ya que este sistema podría estar subestimando las muertes que se producen en el continente africano.
Los investigadores responsables de este trabajo han utilizado datos longitudinales prospectivos del Sistema de Vigilancia Demográfica y de la Salud (HDSS, por sus siglas en inglés) de 30 territorios en 12 países del África subsahariana para estimar el riesgo de muerte de las mujeres desde el parto hasta un año después, por todas las causas.
Entre el 1 de enero de 1991 y el 24 de febrero de 2020 se produjeron 647.104 nacimientos en las zonas recogidas en el HDSS con 1.967 muertes dentro año posterior al parto. Tras los ajustes de los factores de confusión la mortalidad fue 38,82 veces más alta que la basal entre los días cero y uno posteriores al parto, 4,97 veces más alta entre los días dos y seis, 3,35 veces más alta entre los días siete y 13, y 2,06 veces más alta en los días comprendidos entre el 14 y el 41 posteriores al parto.
Desde los 42 días hasta los cuatro meses posteriores al parto la mortalidad seguía siendo 1,20 veces superior (es decir, un riesgo de un 20% mayor), pero las muertes acaecidas en este intervalo quedarían excluidas de la medición de la mortalidad relacionada con el embarazo. “Ampliar el umbral de 42 días posteriores al parto fijado por la OMS hasta los cuatro meses aumentaría la tasa de mortalidad relacionada con el embarazo-posparto en un 40%”, advierten los autores del estudio.
El principal indicador empleado para monitorizar la supervivencia materna hasta los 42 días posteriores al parto es la tasa de mortalidad materna (MMR, por sus siglas en inglés), el número de muertes maternas por cada 100.000 nacidos vivos. El MMR es un indicador fundamental reportado por las agencias internacionales y se utiliza para rastrear el progreso hacia el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3.1: “Reducir la tasa mundial de mortalidad materna a menos del 70% por cada 100.000 nacidos vivos”.
“Ampliar el umbral de 42 días posteriores al parto fijado por la OMS hasta los cuatro meses aumentaría la tasa de mortalidad relacionada con el embarazo-posparto en un 40%”
Sin embargo, la identificación de la mortalidad materna requiere información relacionada con las causas del fallecimiento, así como otros datos como pueden ser la hora del deceso, entre otros. Se establece además, tal y como hemos visto de acuerdo a los criterios de la OMS, que el fallecimiento materno debe producirse dentro de los 42 días posteriores a la finalización del embarazo, por cualquier causa directa (obstétrica) o indirecta (no obstétrica) relacionada y/o agravada por el embarazo. Las muertes maternas que se producen fuera de este periodo son clasificadas actualmente como “muertes maternas tardías”. Tanto las muertes maternas como las muertes maternas tardías se denominan de forma conjunta “muertes maternas integrales” según la 11ª revisión de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11), tal y como explican los responsables de la investigación en The Lancet Global Health.
La vigilancia de la supervivencia materna más allá del umbral de los 42 días posteriores al parto suele ser deficiente en los países con menos recursos y virtualmente inexistente, a pesar de que la OMS recomienda a todos los países monitorizar la mortalidad materna tardía. El problema es que estos fallecimientos no se codifican de forma adecuada de acuerdo con el CIE-11. Una situación que se traduce no solo en una falsa representación de la realidad, sino que imposibilita la comparación efectiva entre los distintos países.
“Hasta donde sabemos, este estudio es el primero en estimar el riesgo elevado de mortalidad por todas las causas durante el periodo posparto prolongado con un gran conjunto de datos compilados de los países del África subsahariana”, exponen los autores. “Con una muestra de casi 650.00 nacimientos y 1.967 muertes dentro del primer año desde el parto, encontramos que las mujeres siguen teniendo un 20% más de riesgo de muerte desde el día 42 hasta los cuatro meses posteriores al parto”, alertan.
“Las implicaciones de nuestros hallazgos para el seguimiento del progreso de la supervivencia materna son cuatro. En primer lugar, nuestros resultados reafirman la solicitud de una revisión del umbral posparto de 42 días para capturar mejor la duración total del aumento del riesgo de muerte después del nacimiento. En segundo lugar, los resultados también exponen la necesidad de definir y contar lo que podría denominarse como muertes relacionadas con el embarazo durante un periodo posparto prolongado, particularmente en el África subsahariana”.
La tercera apreciación que realizan los autores del estudio alude a la necesidad de una renovación de las instituciones con el objetivo de una recopilación de datos óptima y fiel a la realidad. La cuarta y última recomendación es que todos estos cambios únicamente serán posibles “una vez que los organismos internacionales desagreguen sus informes de muertes maternas y relacionadas con el embarazo por tiempo”, concluyen.