La Dirección General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia, integrada en la estructura administrativa del Ministerio de Sanidad, ha iniciado el procedimiento relativo a la exclusión de la financiación de los SYSADOA, tal y como adelantó en exclusiva ConSalud.es el pasado 25 de octubre.
Los fármacos de acción sintomática lenta (SYSADOA, por sus siglas en inglés SYmptomatic Slow Acting Drug for OsteoArthritis), son un grupo terapéutico de medicamentos concebidos para el tratamiento de la artrosis, una patología considerada como la enfermedad reumatológica más frecuente en España y que afecta, especialmente, a mujeres y jubiladas.
"El uso de estos fármacos está acompañado de un perfil de seguridad, lo que evita efectos secundarios significativos en pacientes mayores, que presentan pluripatología y polimedicación"
Con el propósito de ahondar en esta cuestión, ConSalud.es ha entrevistado al doctor Miguel Bernad, especialista en Reumatología del Hospital Universitario La Paz (Comunidad de Madrid). A su juicio, retirar la financiación de estos medicamentos sería "un problema" para los pacientes con artrosis.
"El uso de estos fármacos está acompañado de un perfil de seguridad, lo que evita efectos secundarios significativos en pacientes mayores, que presentan pluripatología y polimedicación", sostiene el facultativo del centro hospitalario madrileño, quien añade que "los SYSADOA han mostrado eficacia en la mejora del dolor y son una alternativa indudable en el tratamiento de nuestros pacientes con artrosis".
"Los SYSADOA han mostrado eficacia en la mejora del dolor y son una alternativa indudable en el tratamiento de nuestros pacientes con artrosis"
En declaraciones a este diario, el doctor Bernad advierte que la retirada de estos medicamentos del arsenal terapéutico conduciría al uso de otros fármacos para controlar los síntomas de la enfermedad, como son los antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) y los opioides, "con las consecuencias que el uso prolongado de estos fármacos tiene y que ya conocemos todos".
Por último, al Ministerio de Sanidad, y en base a su experiencia clínica en la visita de pacientes con artrosis, el especialista en Reumatología le diría que "eliminar esta alternativa terapéutica, en el citado perfil de pacientes, sería muy negativo para la sociedad e incluso para la economía, puesto que va a ser mucho más caro tratar al paciente con estos fármacos y, posteriormente, atender los efectos secundarios generados".