Más de 500 médicos especialistas en la salud de la mujer se han dado cita con motivo del Congreso Diatros, Mejorando la Salud de la Mujer. Este encuentro ha supuesto una ocasión donde poner el foco en el abordaje de salud femenina desde distintas especialidades: ginecología, obstetricia, endocrinología, medicina sexual, medicina antienvejecimiento, reumatología o fitoterapia, entre otras.
“Podemos decir que este encuentro ha sido una gran oportunidad para reunir a numerosos especialistas en torno a la detección de las necesidades actuales en el manejo de la salud de la mujer. En este sentido, se han propuesto recomendaciones, proyectos de investigación, así como puntos de encuentro asociados a este aspecto”, explica el Dr. Rafael Sánchez Borrego, director médico de la Clínica Diatros (Barcelona) de Atención a la Mujer y miembro del comité organizador de este congreso.
Los expertos inciden en la necesidad de una atención integral cuando nos referimos a la salud de la mujer
Los problemas de la salud de las mujeres pueden explorarse observando las distintas fases de su vida. En la infancia, la nutrición adecuada, la actividad física y las inmunizaciones ayudan a establecer las bases para una vida saludable. Durante la adolescencia, es importante prevenir problemas futuros, como la osteoporosis y el cáncer de piel. A lo largo de la edad adulta, la salud y el bienestar, a menudo se centran en el manejo de enfermedades crónicas y en la detección de distintos tipos de cáncer.
Según el Dr. Sánchez Borrego, “cada vez es más necesario que el profesional procure una visión holística en la atención a la mujer. En ella, se fomenta la prevención de la enfermedad mediante la promoción de la salud a través de la alimentación adecuada, la actividad física e inmunizaciones, las cuales establecerán las bases para una vida saludable. Además, los especialistas queremos utilizar los recursos más avanzados en el diagnóstico y tratamiento de múltiples procesos a realizar en la propia consulta del médico”.
CONTROL DE LOS NIVELES DE VITAMINA D
La vitamina D, que en realidad es una hormona debido al tipo de funciones que desempeña en el organismo, podemos sintetizarla en la piel e ingerirla a través de ciertos alimentos. Juega un papel fundamental en las distintas etapas de la vida de la mujer, tanto a nivel óseo como extraóseo.
“El sistema hormonal D es esencial para asegurar una adecuada absorción del calcio de la dieta, además de ser relevante para un correcto funcionamiento del tejido óseo, el control del metabolismo energético, la presión arterial o la defensa antimicrobiana, entre otras. Además, su insuficiencia es la principal causa de fracaso de los tratamientos anti-osteoporóticos”, asegura el Dr. Esteban Jódar, jefe de servicio de Endocrinología del Hospital Quirón Salud de Madrid.
Los especialistas recuerdan que el término ‘vitamina D’ no es del todo preciso, es más concreto utilizar ‘hormona’
Los problemas extraóseos asociados al déficit de 25-OH-D se han estudiado a posteriori (estudios observacionales) y, a medida que aumenta el número de estudios realizados, aparecen más efectos asociados a este déficit.
En este sentido, la Dra. Pingarrón, jefe de servicio de QuirónSalud San José, explica, “los niveles bajos de vitamina D se han relacionado con la diabetes, puesto que los receptores pancreáticos intervienen en la secreción, liberación y resistencia a la insulina. Además, tienen relación con la hipertensión arterial a través del eje renina-angiotensina renal; con alteraciones a nivel cardiovascular y del sistema inmune; enfermedades inflamatorias intestinales, reumatológicas o dermatológicas o, incluso, con el cáncer. En este aspecto, la vitamina D interviene en la trascripción de más de 200 genes”.