Con motivo del Día Mundial de 'Toma de conciencia contra el abuso y el maltrato en la vejez', que se celebra cada 15 de junio, la Asociación Andaluza de Enfermería Familiar y Comunitaria (Asanec) apuesta por la necesidad de "comprender y visibilizar las situaciones de riesgo que padecen muchos de nuestros mayores". Entre estas se encuentra la presencia de cuidadores con problemas psicológicos o de alcoholismo, personas mayores con demencia o aquellos que viven en hogares con problemas de abuso de sustancias.
Asanec ha destacado el "valioso papel que desempeñan las enfermeras de familia y comunitaria en el cuidado, detección y denuncia de estos malos tratos" y ha realizado un llamamiento, tanto a las enfermeras como a las instituciones para que "trabajen juntos en la prevención y erradicación del maltrato a las personas mayores".
Uno de cada seis mayores en entornos comunitarios sufre malos tratos en el mundo y en el caso de maltrato a los mayores en instituciones (residencias) el 33,4% sufren abuso psicológico, seguido del maltrato físico (14,1%), el financiero (13,8%) y las negligencias (11,6%), según un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicado en 2022.
"Este problema se incrementará durante los próximos años debido al rápido envejecimiento de la población"
La Asociación Andaluza de Enfermería Familiar y Comunitaria ha subrayado que las previsiones apuntan a que "este problema se incrementará durante los próximos años debido al rápido envejecimiento de la población". Por este motivo, ha incidido en que "es vital promover una cultura de respeto y dignidad hacia nuestros mayores, asegurando que reciban el cuidado y la atención que merecen, así como informar y denunciar cualquier sospecha".
En este contexto, Asanec ha querido destacar el papel que desempeña la enfermera familiar y comunitaria en el cuidado, detección y denuncia de estos malos tratos. "La presencia de la enfermera de familia y comunitaria en los domicilios y la relación a lo largo del tiempo con estas personas y familias hace posible valorar estas situaciones de riesgo".
"Su cercanía y contacto directo con los pacientes mayores las coloca en una posición privilegiada para detectar signos de maltrato", han dicho la asociación profesional, desde donde han añadido que, "su formación y experiencia les permiten identificar cambios físicos y emocionales que pueden indicar abuso, además de proporcionar el apoyo necesario para intervenir de manera efectiva".
"La formación y experiencia de las enfermeras de familia les permiten identificar cambios físicos y emocionales que pueden indicar abuso”
Hoy en día, se utiliza el término "maltrato a personas mayores", que abarca todas las acciones que causan daño físico, psicológico o material a personas mayores de 65 años cometidas por individuos en una relación personal o profesional con la víctima. Esta definición reconoce la complejidad del fenómeno y la diversidad de contextos en los que puede ocurrir. Estos sucesos pueden conllevar graves lesiones físicas y consecuencias psicológicas prolongadas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), en su Declaración de Toronto, define los malos tratos a personas mayores como la acción única o repetida, o la falta de la respuesta apropiada, que causa daño o angustia a una persona mayor y que ocurre dentro de cualquier relación donde exista una expectativa de confianza. "Esta definición subraya la importancia de la confianza en la relación y la variabilidad en las formas de maltrato", han puntualizado desde Asanec.
En este contexto, el 15 de junio se celebra el 'Día Contra el Abuso y Maltrato de la Vejez', "una fecha crucial para reflexionar y tomar acción contra una problemática que afecta profundamente a nuestros mayores", ha concluido la Asociación Andaluza de Enfermería Familiar y Comunitaria quién ha visto como un paso adelante que "la definición y comprensión del abuso hacia las personas mayores ha evolucionado significativamente a lo largo del tiempo, pasando de ser minimizado a ser reconocido como una grave violación de derechos humanos".