La mala salud bucodental está directamente relacionada con el rendimiento deportivo. Las infecciones en la cavidad bucal pueden causar, desde lesiones musculares y calambres, hasta fatiga o incluso cefalea, mermando tanto las capacidades físicas como el rendimiento de aquellas personas que practican deporte habitualmente.
A pesar de que el 94% de los deportistas en España considera que la relación bucodental está relacionada con la salud general, tan solo un 55% es consciente de que una mala salud bucal puede influir en su rendimiento. Además, casi el 20% indica que solo acude al dentista cuando detecta algún problema específico, según se desprende del Estudio de Salud Bucodental 2019 elaborado por Sanitas.
En este sentido, los deportistas tienen un mayor riesgo de sufrir caries y desgaste dental y de las encías debido a factores como la deshidratación o la ingesta de hidratos de carbono, productos ricos en glucosa o bebidas azucaradas como las isotónicas. Estos problemas bucodentales acaban agravando otro tipo de lesiones físicas.
Las infecciones en la cavidad bucal pueden causar, desde lesiones musculares y calambres, hasta fatiga o incluso cefalea
De esta forma, las caries no diagnosticadas o no tratadas, y las lesiones periodontales, además de provocar dolencias musculares y articulares en lugares del cuerpo como los gemelos, e incluso retrasar la recuperación de las lesiones, pueden causar fiebre y debilidad física en el deportista.
Igualmente, las infecciones no tratadas en la boca contribuyen al cansancio, la aparición de fatiga, la fiebre y la inflamación articular. Esto se debe a que las bacterias que viven en la boca pueden llegar a distintas partes del cuerpo a través del flujo sanguíneo, pudiendo depositarse en los músculos y articulaciones. Esto también tiene consecuencias en la acción de contracción y relajación de los músculos derivando en que el ejercicio resulta más cansado y se experimenta una mayor sensación de fatiga.
Por otra parte, la tensión a la que se ven sometidos los deportistas puede dar lugar a que aprieten la musculatura de la boca y rechinen los dientes. Esto, si se da de manera continuada, puede generar cefaleas, dolores musculares de cuello y espalda e, incluso, alteraciones del equilibrio.
''Además del mantenimiento de una completa correcta higiene bucal y una dieta equilibrada, es necesario que los deportistas estén concienciados sobre la importancia de la prevención. La mayor parte de las patologías que experimentan se pueden evitar con programas preventivos de protección bucal que comprenden aspectos como revisiones previas a la práctica deportiva, así como una revisión al año o cada seis meses'', explica Manuela Escorial, odontóloga de la Dirección Asistencial de Sanitas Dental.