El 40% de los cuidadores admite tener problemas económicos derivados de su labor como cuidador y el 27% ha visto resentida su vida laboral
El informe, que cuenta con el apoyo del Ministerio de Sanidad, analiza la situación actual de la prevalencia y los costes de las enfermedades neurodegenerativas en España. Así, el estudio sitúa la prevalencia de las enfermedades neurodegenerativas en el 2,08% de la población española, lo que supone un total de 988.000 personas afectadas por patologías como el alzheimer y otras demencias, el párkinson, la esclerosis múltiple, las enfermedades neuromusculares o la ELA (esclerosis lateral amiotrófica).Para María Jesús Delgado, presidenta de Neuroalianza, “el abordaje de los problemas relacionados con las enfermedades neurodegenerativas se enfrenta a un escenario muy complejo. Por un lado, existen los factores sociológicos y técnicos como el incremento de la esperanza de vida, el envejecimiento de la población o la cada vez mayor dificultad para los avances científico-técnicos. Y, por otro lado, están los factores socio-económicos como una tasa de paro elevada y sostenida, la precariedad laboral, los costes sanitarios, y la baja inversión pública social y sanitaria. Todo ello hace que nos enfrentemos a serios desafíos a nivel humano, social y económico”.
Además se ha llevado a cabo un análisis detallado de los costes directos e indirectos asociados a estas patologías. Los resultados apuntan a un coste directo medio al cabo del año de 13.063 euros. Esta cantidad incluye objetos que se han tenido que adquirir como por ejemplo un cojín antiescaras, acciones como adaptaciones en la vivienda, servicios que se han tenido que contratar como la rehabilitación, y costes mensuales en los que se ha incurrido como por ejemplo el centro de día.
COSTES INDIRECTOS
El cuidador incurre en una media de gasto, como consecuencia de las tareas que realiza (fisioterapia, medicamentos, etc.), de un total de 151 euros al mes
Por otro lado, el estudio también pone de manifiesto la carga de los gastos indirectos soportados por las personas afectadas. Por ejemplo, el cuidador incurre en una media de gasto, como consecuencia de las tareas que realiza (fisioterapia, medicamentos, etc.), de un total de 151 euros al mes. Por otro lado, la pérdida de ingresos medios que sufre el cuidador, motivada por las tareas de cuidado, comparando los ingresos que tenía antes y después de la enfermedad es de 453 euros al mes. La suma de ambas cantidades resulta en unos costes indirectos de 604 euros mensuales. Los costes indirectos anuales fueron de 7.248 euros en 2015. Entre otros datos, el estudio señala que el 72% de las personas afectadas que forman parte de la población ocupada han estado de baja laboral debido a su enfermedad y un 58% han tenido problemas para rendir adecuadamente en el desempeño de su ocupación. Y por otro lado, que el 40% de los cuidadores admite tener problemas económicos derivados de su labor como cuidador y el 27% ha visto resentida su vida laboral.
Porque salud necesitamos todos...ConSalud.es