El consumo diario de tabaco alcanza al 34% de la población lo que representa volver a cifras correspondientes a 1997, según se desprende de la Encuesta sobre Alcohol y otras Drogas en España (Edades) 2017-2018 elaborada por la Delegación del Gobierno del Plan Nacional sobre Drogas y publicada por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social.
La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica ha puesto su atención en las cifras relativas al consumo de tabaco dado que en este sentido los datos de Edades muestran que el consumo de España de drogas se ha estabilizado excepto el cannabis y el tabaco.
Dos de cada tres fumadores se ha planteado dejar de fumar
En 2017, el 69,7% de la población de 15 a 64 años reconoce haber fumado alguna vez en la vida, el 40,9% en el último año, el 38,8% en el último mes y el 34% diariamente en el último mes, lo que significa 3.6 puntos porcentuales más que en el 2011. Además la encuesta señala también que 2 de cada 3 fumadores se ha plantado dejar de fumar y de estos 2 de cada 3 lo han intentado. En cuanto al cigarrillo electrónico Edades muestra que el 8,8% de la población de 15 a 64 años lo ha usado alguna vez el 1,5% en el último mes.
“Ante estos datos preocupantes, como sociedad científica que representa a los profesionales de la salud respiratoria, Separ pone su larga experiencia en tabaquismo tanto en investigación como en asistencia clínica, a disposición del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social para corregir esta tendencia al alza”, afirma el Dr. Carlos A. Jiménez-Ruiz, presidente de Separ, “y de modo práctico proponemos cinco acciones que permitan frenar el incremento del número de fumadores en España”.
SEPAR PROPONE CINCO MEDIDAS
Así pues, las medidas se concentran en reducir el precio del tabaco; vigilar y controlar el cumplimiento de la actual Ley nacional de consumo de tabaco en lugares públicos, sobre todo aquellos relacionados con el cumplimiento de la legislación en bares, terrazas y restaurantes; extender la regulación del consumo de tabaco a otros espacios públicos; implantar el empaquetado genérico; y, facilitar el abandono del consumo del tabaco a los fumadores. Esta última medida cosnsistiría en incrementar la oferta sanitaria pública a los fumadores para ayudarlos a dejar de fumar, incrementar el número de unidades de tabaquismo en la red pública sanitaria, y financiar los tratamientos del tabaquismo.