Un estudio realizado por Cancer Research UK ha encontrado que a medida que aumenta el uso de cigarrillos electrónicos en los intentos de dejar de fumar ha también ha aumentado la tasa de éxito de dejar de fumar.
Otra de las conclusiones que se extrae de la investigación es que cuando en 2015 se redujo su uso también se redujo el éxito de los británicos para dejar de fumar.
Esto llevó al equipo de expertos a estimar que en 2017 entre de 50.700 a 69.930 personas fumadoras habían dejado de fumar gracias a los cigarrillos electrónicos y que sin ellos habrían seguido fumando.
Este estudio utilizó datos del Estudio de herramientas para fumar, una serie de encuestas mensuales de hogares de personas de 16 años o más en Inglaterra, que se realizaron en forma transversal, desde 2006. Los datos se basaron en aproximadamente 1.200 fumadores del último año cada trimestre entre 2006 y 2017.
La investigación hasta ahora muestra que vapear es menos dañino que fumar tabaco
El análisis de series de tiempo evaluó la asociación entre el uso actual de cigarrillos electrónicos y el uso de cigarrillos electrónicos durante un intento de dejar de fumar con los intentos de dejar de fumar, la tasa general de abandono, la tasa de éxito de dejar de fumar y el consumo promedio de cigarrillos. Se realizaron ajustes estadísticos para la estacionalidad, las tendencias subyacentes, las políticas a nivel de la población, el gasto en medios de comunicación del tabaco y la asequibilidad del tabaco.
La autora principal, Emma Beard, de la División de Psicología y Ciencias del Lenguaje de la UCL, que realizó el estudio con Jamie Brown y el profesor Robert West,de Epidemiología y Atención de la Salud de la UCL, ha comentado que "este estudio se basa en encuestas de población y ensayos clínicos que encuentran Los cigarrillos electrónicos pueden ayudar a los fumadores a dejar de fumar”. “Inglaterra parece haber encontrado un equilibrio razonable entre la regulación y la promoción de los cigarrillos electrónicos. El marketing está estrictamente controlado, por lo que vemos muy poco uso de los cigarrillos electrónicos por parte de los no fumadores de cualquier edad, mientras que millones de fumadores los usan para tratar de dejar de fumar o reducir la cantidad que fuman".
Reino Unido es uno de los grandes defensores del cigarrillo electrónico. Tanto que a mediados de mes lanzó una nueva campaña en la que defienden este método como el más efectivo para dejar de fumar.
Reino Unido es uno de los grandes defensores del cigarrillo electrónico. Tanto que a mediados de mes lanzó una nueva campaña en la que defienden este método como el más efectivo para dejar de fumar.
En un informe, el Departamento de Salud Pública inglés detalla que los cigarrillos electrónicos ayudan a más de 20.000 personas al año en Reino Unido a dejar el tabaco, que mata a ocho millones de personas al año en todo el mundo.
Para los vapeadores españoles el país británico es un espejo en el que mirarse. Así lo dejó claro en una entrevista reciente a ConSalud.es Fernando Fernández Bueno, cirujano oncológico del Hospital Gómez Ulla y portavoz de la Plataforma para la Reducción del Daño por Tabaquismo. Fernández le pidió el Ministerio de Sanidad que escuchen sus argumentos “y miren lo que está haciendo en otros países como Reino Unido”.
No es la primera vez que el Gobierno británico lanza una campaña de este tipo, la del diciembre pasado fue una de las más sonadas. Esto ha propiciado, entre otras cosas, que este país tenga uno de los datos de consumo más elevados de la Unión Europea. Según datos de la Asociación Nacional del Cigarrillo Electrónico (ANCE) hay unos 2,8 millones de usuarios.